El cuerpo femenino está lleno de misterios en muchos aspectos, de hecho hay cosas que las mujeres ni siquiera saben que existen, porque quizás jamás las han experimentado. Ese es el caso de la vulvodinia, el dolor femenino, una enfermedad crónica que algunas mujeres padecen y hoy le contaremos todo sobre ella.
En primer lugar, debe saber que la vulvodinia es un síndrome doloroso extraño, complejo y poco conocido que afecta a las mujeres entre los 20 y 65 años de edad. Básicamente, la vulvodinia es definida como dolor vulvar y aún no tiene causa conocida o concreta. Es diferente del dolor que se siente profundamente en la pelvis o internamente en la vagina.
Algunas teorías sugieren que la vulvodinia puede estar relacionada con el daño o la irritación de los nervios, respuestas anormales a la irritación o inflamación, reacciones alérgicas, espasmos musculares, una historia de abuso sexual, o el uso frecuente de antibióticos.
También se ha sugerido que los factores familiares o genéticos desempeñan un papel en la vulvodinia. Por desgracia, la causa exacta no se ha determinado y la mayoría de las mujeres no han conocido los factores contribuyentes. Este dolor varía su gravedad dependiendo del caso, Frecuentemente se produce en ausencia de signos físicos o anomalías visibles. En ocasiones, interfiere con la actividad sexual y puede causar dolor durante el coito.
Algunas veces la enfermedad aparece después de una infección vaginal por hongos, virus o bacterias. Por ejemplo, las verrugas genitales se asocian a la vulvodinia. En otras ocasiones la vulvodinia aparece después de una alergia de la vulva debida al uso de jabones, detergentes, perfumes, y prendas de vestir muy ajustadas que liberan químicos irritantes. Igualmente, el uso de antibióticos y esteroides vaginales pueden desencadenar esta enfermedad.
Entre los síntomas de la vulvodinia, el dolor femenino está el ardor muy intenso sobre la vulva, que puede alcanzar el ano o el clítoris y la uretra. Irritación, como si hubiera una abrasión, hasta llegar a la presencia de micro cortes o cortes propios y verdaderos. Sensación de agujas, que se clavan en la mucosa. Descargas eléctricas. Sensación de haber recibido un golpe. Sensación de extrema sequedad, picor, hinchazón o dolor generalizado. Dolor anal o rectal y dolor que aumenta sentándose.
Ahora bien, si usted sospecha que está sufriendo de vulvodinia debe tener en cuenta que no existe un examen específico que confirme la existencia de ella, por lo tanto el diagnóstico se realiza a partir de los síntomas antes mencionados, Sin embargo, dado que las infecciones vaginales como candidiasis, vaginosis bacteriana y vaginitis se asocian a veces con ardor y picazón, se necesitarán otras pruebas de diagnóstico para descartar estas infecciones.
En definitiva, la vulvodinia, el dolor femenino, se puede tratar con medicamentos o con autocuidados, no todos los tratamientos serán efectivos para cada mujer, tal vez tendrá que probar diferentes tratamientos para encontrar la opción más eficaz. No obstante, le podemos recomendar cremas tópicas de estrógenos, anestésicos tópicos o locales, antidepresivos tricíclicos y anticonvulsivos, en ocasiones útiles para controlar el dolor crónico.
ALFA