El tren representa una experiencia distinta, resulta la mejor opción para aquellos quienes le temen a volar. Viajar en tren por Europa puede ser rápido y cómodo al organizar su itinerario.

Con 15 días de viaje puede visitar 13 ciudades, empezando en París, Francia. Se recomienda conseguir los pases necesarios con anticipación. En París podrá disfrutar de sus principales atracciones como la torre Eiffel, el Museo del Louvre, la Catedral de Notre Dame, el Cementerio de Père Lachaise, el Moulin Rouge y la Basílica de Sacré-Cœur.

viaje_en_tren_por_Europa_joya_life
Dentro de la misma Francia, viajará de París a Versalles, con una duración del viaje de 12 minutos. Allí puede visitar el Palacio de Versalles, el lugar de ensueño de María Antonieta, su escape de la vida real.

Desde Versalles solo son necesarias 4 horas y 27 minutos para llegar a Ámsterdam, Holanda. La ciudad le ofrece el Museo de Van Gogh y la Casa de Rembrandt, la Zona Roja, el parque Vondelpark y la Estatua de Ana Frank, para conocer.

Al culminar su recorrido, se dirige a otro tren para llegar a Berlín en Alemania, 6 horas y 15 minutos que le permitirán descubrir el Museo de Historia sobre el Muro de Berlín, Galería del Este, la Puerta de Brandeburgo o el Monumento al Holocausto.

Su viaje continúa a Praga, República Checa, sin dejar de visitar el Puente de Carlos; de ahí son 7 horas hasta Salzburgo, Austria, para ambientarse en la película de Hollywood: La Novicia Rebelde.

Después de su estadía puede optar por dos opciones, acortar por 2 horas su visita a Venecia, Italia, dirigiéndose a Füssen de regreso en Alemania; o quedarse en el primer cambio de tren en Múnich.

Este importante avance solo le separa de Venecia por 8 horas de trayecto, donde podrá disfrutar de la experiencia única de pasear en Góndola por sus encantadores canales románticos.viaje_en_tren_por_Europa_2_joya_life (1)

De Venecia a la ciudad renacentista de Florencia, dentro de la hermosa Italia, a solo 3 horas de viaje, donde se encuentra la escultura más reconocida del planeta, la Estatua de David de Miguel Ángel. Roma, se encuentra a tan solo 1 hora y media.

El Coliseo o La Fontana di Trevi son los lugares más emblemáticos de la capital, desde allí son solo 10 minutos hasta la Ciudad del Vaticano, que forma parte del itinerario.

Desde la ciudad de Roma le separan 8 horas de viaje hasta Monte Carlo, Mónaco, incluyendo dos cambios. El glamour de Mónaco se destaca en el Casino de Monte Carlo, el circuito del Gran Premio de Mónaco, el Palacio del Príncipe y la Catedral.

Como último trayecto de Monte Carlo a Barcelona, España, se resume en 9 horas y media de viaje para observar la imponente fachada de la Sagrada Familia que marcará el final de un recorrido inolvidable.

viaje_en_tren_por_Europa_3_joya_life

Viajar en tren es puntualidad, pulcritud y rapidez, donde no controlan el número de maletas ni su peso. Por su parte, los trenes hotel no justifican su precio por su calidad, así que deséchelos como opción a la hora de emprender esta increíble travesía.

ALFA