Disfrute sus vacaciones aunque padezca de osteoporosis. Viajar es un placer que no debe dejar de lado; puesto que, padecer alguna limitación funcional, no supone renunciar a disfrutar de un merecido descanso. Sin embargo, conviene saber que la osteoporosis es una enfermedad que hace que los huesos se debiliten y se rompan con facilidad. Por ello, es importante tomar en cuenta algunas medidas pertinentes para no correr riesgos, y pueda divertirse durante el viaje. No obstante, la consulta previa al médico resulta conveniente.
Primeramente, no hay que olvidarse que lo más importante es planificar con antelación, ya que las necesidades son mayores. También, elegir el destino, qué vestimentas llevar, el transporte (es relevante para su seguridad y comodidad); además, su botiquín de medicinas ¡no debe faltar!
Si usted eligió como medio de transporte la vía aérea, ¡optó por la mejor decisión! Las compañías aeronáuticas ofrecen un trato especial a ciertos tipos de pasajeros enfermos o con algún problema de movilidad. Por otro lado, para que las agencias viajeras puedan brindar ayudas oportunas, es necesario informar de las circunstancias especiales del pasajero, en el justo momento de hacer la reserva.
Pues bien, en su equipaje de mano lleve una cantidad suficiente de todos los medicamentos que usted tome. Pensando en función del cambio de itinerario, consulte a su médico si es conveniente cambiar sus dosis, al llegar a su destino; igualmente, tome en cuenta que el aire en los aviones es seco, por lo tanto, beba suficiente agua para evitar deshidratarse.
Asimismo, para no sentirse afectada por el desfase de horario; es beneficioso dormir suficiente antes de salir de viaje y consumir alimentos balanceados. De igual manera, si el traslado dura más de dos horas, es saludable levantarse de vez en cuando durante el vuelo para mover los pies, brazos y cuello; con el fin de evitar la aparición de coágulos en las piernas o posibles contracturas musculares.
Considere que todo desplazamiento implica la elección de ropas cómodas; tome en cuenta adaptar el vestuario a la temperatura del sitio; por lo tanto, es pertinente informarse del clima del lugar de destino, para que su salud no se sienta afectada.
Por otra parte, es importante elegir el escenario para sus vacaciones. Lo más acertado es la playa. Es una deliciosa manera de descansar, beneficiosa para su salud y tiene menos riesgos de caída. Además, el sol es fuente de vitamina D, valiosa para la actuación del calcio. Los especialistas recomiendan tomarlo de forma moderada y al mismo tiempo ejercitarse a través de la natación; por consiguiente, los componentes de la brisa marina, tiene efectos positivos y son eficaces en las afecciones reumáticas.
Del mismo modo, la composición mineral del agua del mar, como el calcio, potasio y el sodio; es favorable para fortalecer los huesos y los tendones. Sin duda alguna, son los elementos propicios para ayudar a su organismo.
Todo lo que suponga nuevos estímulos es aconsejable para mejorar su calidad de vida. Siga haciendo turismo, ¡regálese unos días para el disfrute y beneficio de su salud!
ALFA