Si bien escuchamos a diario que para mantenernos sanos, es importante comer de la mejor manera posible y realizar una actividad física constante, no siempre tenemos el conocimiento y las recomendaciones específicas y puntuales relacionadas con esta materia.
Por ejemplo, todos saben que se deben tomar de 8 a 12 vasos de agua al día (que equivalen a dos litros), pero no siempre se explica que en éstos se incluyen también los jugos, batidos o aguas con sabor; y además no deben tomarse conjuntamente con las comidas, sino 20 minutos antes o después de ellas, porque de lo contrario se dificulta la digestión.
Sobre el azúcar, la fructuosa y el edulcorante se dice de todo un poco, algunos aseguran que lo mejor es suprimir toda la ingesta de azúcar refinada, otros dicen que la mejor opción es el consumo de la fructosa porque es totalmente natural al provenir de las frutas, y por último, muchos se preguntan si los edulcorantes son dañinos para la salud.
María Garofalo, Licenciada en Nutrición y Dietética afirma que: “en cuanto al azúcar, todo depende de qué tipo de actividad física realice la persona, y de si se encuentra en un régimen bajo en calorías”. Además asegura que existen diversas opciones para endulzar nuestros alimentos, postres y jugos sin efectos negativos, como el azúcar integral, la cual no ha sido sometida al proceso de refinado, y por ende contiene todos los microelementos que la industria llama “impurezas”, que resultan muy beneficiosos para el organismo y es de fácil absorción y digestión.
También existe una planta endulzante alternativa, que se puede conseguir en tiendas dietéticas en diversas formas, y se llama “stevia”. La “stevia” es un endulzante natural que además de ser beneficioso para el organismo, puede ser la mejor alternativa para diabéticos y personas que no pueden consumir azúcar.
Otro de los mitos de la alimentación es que no es recomendable ingerir frutas durante la noche, porque sus azúcares se pueden convertir en grasas. Respecto a esto, la experta señala que el proceso de absorción de la fructosa desencadena un incremento de los triglicéridos, al igual que todos los carbohidratos simples y bebidas alcohólicas.
Sin embargo, el secreto está en no comer las frutas en exceso (tres raciones diarias), por lo que se pueden ingerir en cualquier momento del día. Por otra parte, la vitamina C que contiene la fruta, permite que al ser ingerida como postre, se obtenga una mayor absorción del hierro que provee un plato de carne o de leguminosas.
Tenga siempre presente que una buena alimentación le permitirá evitar algunas enfermedades, tener una vida activa y además verse bien. Nunca olvide que usted es lo que come y por ende debe saber hacerlo bien.
ALFA