Miércoles, 09 de diciembre de 2015. Se ha descubierto una superbacteria altamente mortífera procedente de China, que ha generado advertencia sanitaria, ante un inminente peligro; porque se propaga velozmente desde Europa.
La superbacteria resistente a todos los métodos de tratamiento existentes llegó a Europa a través de la carne de pollo, y causa una fuerte neumonía imposible de curar. El primer caso ha sido registrado en Dinamarca, donde recientemente han hospitalizado a un paciente. Los análisis han revelado que la bacteria que afectó al ciudadano danés es una nueva versión mortífera de las bacterias del tipo Escherichiacoli, que contienen un gen mutado conocido como MCR-1 y es resistente a los antibióticos más potentes, incluso a la colistina.
Se rastreó por primera vez en las personas y el ganado en China; y pudiera acabar con la humanidad si no se busca algo eficaz para combatirla. La colistina, es una de las últimas armas para batallar contra bacterias polirresistentes; por lo que es alarmante el descubrimiento de la superbacteria que es considerado por algunos científicos de China, como un indicativo de que el mundo se encuentra en el umbral de una era post-antibiótico; debido a que la bacteria puede anular la efectividad del antibiótico tanto en pacientes como en ganado. Esta resistencia se puede propagar por todo el mundo y aumentar el espectro de infecciones intratables.
El hecho de que las bacterias se están haciendo completamente resistentes a los tratamientos (estimado como el apocalipsis de los antibióticos), podría según algunos especialistas, hacer retroceder la medicina a una era en que las infecciones más comunes podrían ser mortales. La situación es tan impresionante dentro de la comunidad científica, que entre ellos opinan sobre la imposibilidad de buscar algo que la mate; redimiéndonos a los tiempos oscuros de la Edad Media.
Dichas referencias entre los científicos, respecto a un posible tratamiento de la superbacteria y el futuro que nos podría deparar, son divergentes. Científicos daneses creen que los médicos podrían intentar mezclar varios medicamentos buscando una combinación que mate la bacteria. Por su parte, expertos de la Universidad de Birmingham son menos optimistas y sostienen que es solo cuestión de tiempo para que aparezcan combinaciones peores de la superbacteria; puesto que es resistente a todos los métodos de tratamiento con que cuenta la medicina moderna. La potente MCR-1 parece moverse fácilmente entre las cepas de E. coli y otras bacterias comunes, aumentando su riesgo de propagación sin nada qué poder hacer.
Con suerte la era post-antibiótico todavía no ha llegado. Sin embargo este (estudio realizado por científicos), debe servir como llamado de alerta al mundo. La resistencia a los antibióticos mata a unas 700.000 personas en todo el mundo cada año y para el 2.050 la cifra será alucinante, 10 millones de personas.
ALFA