Detectar a un hombre manipulador, es más sencillo de lo que cree; solo basta con estar muy atenta a esas mínimas señales que le avisan en que algo no está bien; ya que este tipo de hombres mantienen ese perfil de manipulación, para controlarla a su antojo. Por esta razón, si usted sospecha de esta dominante conducta, ¡tenga cuidado!; pues podría acarrearle problemas sicológicos y sociales. A continuación, conozca cuáles son las señales que delatan a un hombre manipulador, ¡tome nota!
Según estudios, se dice que la manipulación viene acompañada de dos acciones principales: el chantaje emocional y la explotación mental. Estas se adaptan a diferentes conductas que trabajan en conjunto para poder llevar a cabo dichas acciones, entre ellas destacan:
La tendencia a mentir: el hombre manipulador no puede vivir sin la necesidad de mentir en lo más mínimo. Utiliza este mecanismo de defensa, con la finalidad de justificar sus actos y quedar “bien”, sin importar a quien hiera. Muchas mujeres reconocen este defecto en sus parejas; sin embargo, la mayoría se hacen la vista gorda.
La adulación: el halago es típico en el hombre manipulador, él sabe perfectamente cómo hacerla sentir especial e importante; aprovechándose de sus debilidades para conseguir algún beneficio. ¡Detrás de un halago, hay una intención oculta!
Influye en sus decisiones: el manipulador buscará cualquier manera para impedirle hacer lo que él no quiere que haga, por ejemplo, si usted desea salir de paseo con sus amigas, él rápidamente jugará con su mente manifestándole que teme perderla, que no confía en las personas que están a su alrededor y prefiere que se quede en casa. ¡Usted inocentemente obedece, y él gana!
Se hace el ofendido: es la mejor forma que tiene el hombre manipulador para salir airoso cuando es descubierto en la mentira, toma una actitud victimizada y hasta reprocha con argumentos falsos a la persona afectada por su actitud. No admite sus errores, y busca culpables para justificar sus actos. Aparenta estar “dolido”, para alcanzar su cometido.
El chantaje: ¡no podíamos olvidarnos del clásico chantaje!, este método lo emplea el manipulador cuando ha detectado que usted ya está cansada de su actitud y ha decidido poner fin a la relación. En este caso, él querrá recordarle todos los momentos vividos; y le exclamará el hecho de no poder vivir sin usted e incluso le insinuará acabar con su vida por tal situación.
ALFA