Los aceites esenciales son compuestos orgánicos extraídos de productos naturales a los que se les atribuye una gran cantidad de propiedades. Se utilizan principalmente en tratamientos holísticos, como la aromaterapia para mejorar la salud física, emocional y mental, aunque también han sido utilizados en el campo dermatológico y en el estético.
El origen de los aceites esenciales es milenario y han sido utilizados para tratar diferentes problemas de salud, en la belleza, en la limpieza y en la medicina natural. Uno de estos es el aceite esencial de café, el cual es muy aromático y se obtiene del prensado de los granos de “caffea arábica”, que previamente han sido tostados.
Según el dermatólogo Tarcila Taborda, este extracto ha sido utilizado en el área dermatológica por sus beneficios sobre la piel gracias a sus niveles de flavonoides y polifenoles, que tienen propiedades antioxidantes más potentes que la vitamina C y el té verde. Además actúa como blanqueador sobre la piel y es beneficioso para las pieles secas o con celulitis.
También se utiliza para combatir el envejecimiento debido a su alto contenido de vitamina E, ácidos grasos y antioxidantes, aumentando así la producción de colágeno y manteniendo la piel suave y libre de arrugas. Por ello, es recomendable agregar unas gotas de aceite esencial de café a su crema de día y combinarlo con unas gotas de aceite de jojoba, para que hidrate su piel y le proporcione la estabilidad que necesita, disminuyendo las arrugas y renovando las células de la piel.
En la estética, se utiliza para disminuir las ojeras y las manchas debajo de los ojos, actuando como descongestionante de la zona y ayudando a su desinflamación, debido a que estas se producen por mala circulación en el área, por cansancio o por mala alimentación. Asimismo, se puede utilizar en el cabello, ya que le aportará brillo y resistencia, incrementando la queratina, para ello solo debe friccionar unas gotas en las raíces por un periodo de quince días antes de dormir, para lucir una cabellera sana y fuerte.
De igual manera, se utiliza para dar masajes, ya que fortalece los músculos y aporta vitalidad al organismo, aliviando los dolores articulares y musculares. En aromaterapia es frecuente su uso en personas con fatiga física, agotamiento, tensión nerviosa y estrés, mediante la difusión del aceite esencial del café en áreas de descanso.
Asimismo, al utilizarlo en un difusor, da calidez al lugar de trabajo o a las habitaciones de la casa. En el ámbito de higiene personal, se utiliza en enjuagues bucales debido a su poder desinfectante y refrescante, así como para eliminar el mal aliento.
Puede utilizar el aceite esencial de café como un antidepresivo natural, para ello empape uno trozos de algodón con el aceite y colóquelos cerca de la cama. De esta manera su aroma actuará como vigorizante y le ayudará a que su ánimo mejore.
ALFA