Algunos perfumes femeninos se han ganado un lugar en la preferencia de millones de mujeres alrededor del mundo como los más icónicas de todos los tiempos. Fragancias inconfundibles que transmiten personalidad, estilo e identidad, pero que también dicen más que mil palabras. Logrando así cautivar no solo por su fragancia sino también por ser símbolos eternos de un estilo de vida.

Perfumes femeninos Chanel Nº5
Imagen de invisiblesith en Pixabay 

Es así como más allá de su olor, son varios los factores que se conjugan para que un perfume pueda convertirse en un icono atemporal. Entre ellos su historia, el frasco o la fijación, son solo algunos. Pero mucho tiene que ver con ello, la unión entre el mundo la moda, la publicidad y el cine.

Por ello, aunque existen en el mercado miles de perfumes femeninos solo unos pocos se han mantenido sin rival y a continuación conoceremos sus nombres.

Chanel nº 5, el más vendido entre los perfumes femeninos

Cada 30 segundos alguien compra un frasco de este perfume con toques de jazmín y una estela infinitamente sensual. Por lo que no es extraño que sea el perfume más vendido de la historia y que haya alcanzado el estatus de símbolo cultural. Creado en 1921, esta mítica fragancia actualmente reinventada ha visto pasar el tiempo y las modas, pero su aroma sigue siendo el mismo.

Los perfumes florales de aquel entonces no eran del agrado de Gabriel Chanel porque no expresaban la personalidad de la mujer. Así que encargo al perfumista Ernest Beaux que creara “Un perfume de mujer con olor a mujer”.

Fiel a su deseo, crearía una fragancia sin referencia a ningún componente natural en concreto. Gracias sus más de 80 componentes y al uso de aldehídos para realzar distintas esencias, siendo por ello, una fragancia innovadora para la época. Su nombre proviene del hecho que fue la quinta propuesta que Beaux presento a Chanel.

Sin embargo, el chanel nº 5 no sería lo que es hoy si no fuese por el mundo del cine. Teniendo entre sus admiradoras a estrellas como Marilyn Monroe, Catherine Deneuve, Kate Moss o Nicole Kidman.

Miss Dior de Christian Dior, un himno al amor

Presentado el 12 de febrero de 1947, Miss Dior fue el primer perfume de Christian Dior. Se trata de una mezcla sublime de notas verdes y amaderadas que mandó hacer en honor a su hermana Catherine. Y que él quería que fuera un perfume que desfilara amor, inspirado en los efluvios del jardín de Granville, en Normandía, donde pasaron su infancia.

El resultado un dulce aroma a lirios, narcisos y rosas, que fue todo un éxito desde el primer día. Y aun hoy no ha perdido un ápice de su alegría, juventud y originalidad. Otro de talle que lo hace icónico es su frasco. Pensado también como un objeto de lujo es singular y único, creado como si se tratara de una pieza de alta costura. Miss dior cobra vida con la joven mujer revolucionaria, contestataria y femenina.

Opium de Yves Saint Laurent, el más controvertido de los perfumes femeninos

Lanzado por la firma Yves Saint Laurent en 1977. Este es uno de los perfumes que más controversia ha generado y que siempre ha dado de que hablar. Luego de su lanzamiento una coalición de americanos con ascendencia china pidió que su nombre fuera cambiado. Ya que lo consideraban poco respetuoso con las Guerras del Opio que se habían librado en China.

Sin embargo, este hecho solo consiguió generar más publicidad y fama, haciendo de Opium el mejor lanzamiento de ese año. Obteniendo 3 millones de dólares en ventas en solo 10 meses. Este atrevido perfume de notas orientales es una mezcla de mandarina, cilantro y pimienta solo apto para mujeres seguras de sí mismas y de su sensualidad.

Classique de Jean Paul Gaultier, la máxima expresión de feminidad

Este perfume de Jean Paul Gaultier nació en 1993, y tiene uno de los frascos más reconocidos de la historia de la perfumería. Un frasco que reproduce el cuerpo encorsetado de una mujer en clara referencia al estilo parisino más chic y elegante. Sin duda, su envase es una constante fuente de expresión de la feminidad y ha sido fuente de inspiración para muchas campañas publicitarias.

Es así como el torso femenino de su frasco y su combinación de cítricos, anís, vainilla y pétalos de rosa, buscan por encima de todo ensalzar la figura femenina. Algo que también ha estado presente en todas sus campañas publicitarias desde su lanzamiento, a través de un icónico corsé y una ópera de fondo.

Un detalle curioso que resulta contrastante es que la caja del perfume, es una simple lata de conserva. Aunque tiene el diseño y la sofisticación que transmite el propio frasco.

Angel de Thierry Mugler, el más afrodisíaco entre los perfumes femeninos

Creado en 1992 por Oliver Cresp e Yves de Chirin para el diseñador Thierry Mugler. Tiene un aroma amaderado y oriental, en el que la vainilla y las esencias blasamicas son las más notables en su composición.

Una fragancia inspirada en la infancia del diseñador y que a pesar de sus aromas dulces intenta transmitir sensualidad, considerado también un perfume afrodisíaco. Ya que contiene pachulí y almizcle, dos aceites que estimulan la circulación de la sangre y que hacen que aumente la temperatura corporal. Pero además contiene feromonas.

Sin dudar este es un himno a una feminidad y sensualidad, que se complementa con un igual de icónico frasco azul en forma de estrella. En perfecta metáfora de que esta fuera de lo terrenal y de lo lejos que ha llegado esta fragancia.

Eternity de Calvin Klein, un símbolo del amor eterno

Con más 30 años de historia, este es uno de los perfumes femeninos más vendidas de la historia. Algo que no debe extrañar, pues luego de su lanzamiento en 1988, este perfume floral de alma opulenta, efusiva y casual recibió diversos premios. Que ayudaron a cimentar su reputación como un perfume para la eternidad y que haya traspasado la barrera del milenio siendo todavía muy admirado.

Se trata de perfume que simbolizaba el amor y el compromiso eternos. En el que destaca un aroma compuesto por unas notas de salida de cítricos, verdes, fresia y salvia. Su estela va de moderada a robusta y su longevidad hace honor al nombre de la fragancia, fijándose con persistencia sobre la piel.

ALFA