Hay mujeres que toman la decisión de permanecer solteras por voluntad propia y, aunque cueste creerlo, es una nueva tendencia, con muchas seguidoras. En gran parte, cuenta la actitud asumida; ya que disfrutan de lo que tienen, dejando a un lado las constantes presiones que suelen ejercer sobre ellas una sociedad, donde les hacen concebir que el matrimonio sea la única meta que una mujer puede tener.
Si bien es cierto, que todas necesitamos de manera especial amor y afecto, eso no significa que podamos carecer de ellos, por el simple hecho de permanecer solteras por voluntad propia. Cuando se tiene la firme convicción de enfrentarse sola a los grandes retos de la vida, usted está dando un gran paso hacia el éxito que implica estar al mismo nivel que los hombres.
Anteriormente, muchas mujeres se veían en la imperiosa necesidad de casarse, estrictamente por carecer de estudios y de un trabajo digno, con el cual poder salir hacia adelante. Hoy en día las circunstancias han cambiado, permitiéndole ver el fruto de sus esfuerzos hecho realidad; unas condiciones puestas en circulación en la Conferencia Mundial de las Mujeres en “Beijing” “Pekín”, en 1995.
En dicha reunión, se colocó en movimiento todo el tema sobre el empoderamiento de las mujeres, refiriéndose al aumento en la participación de las mismas, en el proceso de toma de decisiones y acceso al poder. Razones de peso para la toma de conciencia en la soberanía, que individual y colectivamente exhiben todas las mujeres, teniendo que ver con el rescate de sus propias dignidades como seres humanos.
Por otro lado, a nivel profesional y laboral, los principios de empoderamiento de la mujer en el lugar de trabajo, los mercados y la comunidad; se basan en nociones elaboradas entre ONU mujeres y el Pacto Mundial de las Naciones Unidas, promoviendo la igualdad de género desde la dirección, al más alto nivel. De igual manera, motivando educación y desarrollo competitivo; se enfoca la participación de ellas, con una mentalidad meritoria, aprovechando la diferencia en pleno siglo XXI.
Enfocándonos en este gran contexto, no es de extrañar que, tanto usted como otra mujer que por voluntad propia le dice no al matrimonio, se encuentren totalmente capacitadas para enfrentar las diferentes circunstancias que rodean su existencia. En primer lugar, goza de suficiente libertad para hacer lo que quiera, siempre y cuando no perjudique a nadie. En el canal “YouTube” “Canal Sur Web”, verá a una mujer que decidió ser madre soltera por voluntad propia.
Estar soltera no es un problema; comprender nuestro propio valor luego de lograr ser más que suficiente, es un estilo de vida. También, bajo esa libertad puede planear tener un hijo con mucha responsabilidad.
Que una mujer sea independiente, es algo que muchos hombres no asimilan; encontrar una pareja sin el requisito de casarse, es un reto individual, que quizás desee imponerse, conservando su soltería como algo sagrado.
ALFA