Aunque parece un término de ciencia ficción, la medicina cuántica es mucho más real de lo que mucha gente piensa, presentándose actualmente como una disciplina alternativa a la medicina convencional, que a diferencia de esta considera al ser humano como un todo y además emplea la energía cuántica para su bienestar.
Basada fundamentalmente en la teoría cuántica. Tal como lo explica esta través de sus postulados, el universo está conectado entre sí a través de interacciones energéticas, que inevitablemente afectan el orden vibratorio de las partículas componentes de cualquier tipo de materia, inclusive nuestros cuerpos. Por lo que según la medicina cuántica, la modificación o desequilibrio de esta interacción tendrá incidencia en nuestra salud y vida, manifestando como resultado una enfermedad. ¿Pero qué es entonces la medicina cuántica? y ¿Cómo podemos beneficiarnos de ella?
Para entender un poco más este concepto, conviene aclarar primeramente que en esta medicina el término “cuántico”, es usado para hacer referencia a todo aquello que existe a nivel subatómico, un mundo que es prácticamente invisible. Es así, como todo lo que se encuentra a este nivel, emite o recibe energía en pequeños valores llamados “cuantos”, los cuales solo pueden ser medidos en forma de frecuencias u ondas.
Considerando esta capacidad para emitir y absorber energía, además de la posibilidad de influenciar las frecuencias, la medicina cuántica viene a ser ese enfoque holístico, mediante el cual se busca restablecer el orden energético del cuerpo humano, trabajando para ello desde el nivel más pequeño posible.
¿Cómo se logra esto? Una de las herramientas usadas por el doctor o terapeuta es un equipo de biorresonancia. A través de él, se realiza el reconocimiento de las resonancias patológicas de cada enfermedad o padecimiento, las cuales una vez analizadas permiten determinar y proceder a la correcta aplicación de microfrecuencias electromagnéticas, para producir con ellas estímulos cuánticos que reactiven el flujo energético óptimo del cuerpo, y su capacidad autocurativa.
Aun cuando este equipo tiene como campo de acción todo el cuerpo, también permite actuar puntualmente en las zonas que lo ameriten, con la ventaja adicional de ser un tratamiento no invasivo y no tener efectos secundarios, razón por la que algunos se atreven a calificarla como la medicina del futuro.
Si bien parece una terapia reciente, lo cierto es que la metodología clínica empleada en la medicina cuántica, tiene más de mil años de antigüedad presente en la medicina tradicional de los himalayas. Sin embargo, tal y como lo señala el doctor Ernesto Vega, médico cirujano y docente de la facultad de medicina de la Universidad de Chile, “actualmente hay muy pocos profesionales en el mundo capacitados en medicina cuántica”.
Aunque la medicina cuántica parece eficaz en el tratamiento de algunas enfermedades, y una cierta cantidad de pacientes, han afirmado haber experimentado mejoría en sus padecimientos, dada la escaza evidencia científica y estudios que lo comprueben es recomendable actuar con cautela. Por lo que puede considerarse más como una disciplina complementaria, que un reemplazo a los tratamientos de la medicina convencional.
ALFA