Las maravillosas joyas textiles, han desplazado sorprendentemente al metal, para hacer sentir la suavidad e incandescencia de la tela; con lo cual, se ha cambiado el orden, en una prenda de tejidos. Sin embargo, el resultado es una joya sutil, con una técnica tan bien elaborada, que funciona como una temática única, rebelde, de una increíble pieza vanguardista.
No obstante, una joya no solo significa sólidos metales que sostienen una piedra o un grabado; en realidad la moda avanza a pasos agigantados, sorprendiéndonos con innovaciones fuera de lo convencional. Una joya textil, se atreve a mostrar un estilo diferente, marcando una tendencia cultural avanzada, con más seguidores de lo que usted se imagina.
Las piedras preciosas se utilizan pegadas firmemente al tejido, sin necesidad de parecer un accesorio; haciendo remembranza de tiempos antiguos como en la Edad Media. En ese tiempo, hermosas joyas eran incorporadas directamente a las vestimentas; mujeres de esa época, recurrían a fajas de telas, con perlas, piedras y metales; un inicio que ha revolucionado, en increíbles materiales.
Por lo tanto, se abren oportunidades de disfrutar las joyas textiles, en una sociedad llena de modernismo y siempre dispuesta a probar otras opciones. El desenfrenado frenesí, colocado por los artesanos y joyeros, que discurren una alternativa diferente, se hace sentir; viendo la coronación de tanta creatividad, esfuerzo y audacia en la inclinación de la más exquisita clientela, que desea probar cosas incomparables.
Por eso, no es de extrañar, que famosas del cine, la televisión y el modelaje, recurran a diseñadores que han dejado un poco atrás; la forma habitual de realizar las joyas, para introducirse en el concepto. El mercado se reinventa, la gente desea cambios con propuestas atrevidas; donde se fusionen las diferentes disciplinas con artesanías urbanas, demostrando que las joyas textiles se pueden unir a un status de lujo, dirigido también a grandes celebridades.
Las joyas textiles se orientan en técnicas de artistas, elaborándolas como piezas esculturales, lo que permite que se tome un poco de cada cosa, siendo expuestas como verdaderas obras de arte, calificándolas en auténticas prendas. Eso lo podemos ver en majestuosos collares, que comienzan en el cuello, expandiéndose por todo el cuerpo, descubriéndose en un instante, los diferentes aspectos de la joya.
Igualmente, se encuentran bellísimos anillos cubriendo la totalidad del dedo, identificados con un género capaz de conservar diferentes formas, y donde la fibra vegetal cumple. Además, en muchas ocasiones, la orfebrería moderna combina la plata, como uno de los metales preferidos para resaltar esos tejidos; en ese sentido, la diseñadora argentina de joyas textiles, Silvina Romero, afirma que no produce pensando en hacer una pieza de joyería; “lo primero que hago son las esculturas, objetos, juguetes, que luego mutan para ser llevados en el cuerpo”.
En definitiva, es necesario correr el apasionante riesgo, de lucir una joya textil, que resaltará mucho su personalidad, abriéndole nuevos gustos y a la vez; sentirá la total satisfacción, de poseer una pieza deslumbrante, que todos admirarán.
Todas estas joyas textiles son muy buena opción para combinar con ropa informal y aun verse arreglada.