Las manicuras en gel son una excelente alternativa para tener las uñas hermosas por mucho más tiempo. ¿Acaso no le ha pasado que después de gastar su tiempo y dinero en una manicura, al salir del salón o a los pocos días ya se la ha dañado? Por eso estas manicuras permanentes son las favoritas de muchas mujeres.
Pero, ¿es seguro este tipo de tratamiento? ¿serán cierto los rumores que hay a su alrededor? ¿causarán enfermedades? Surgen muchas preguntas al hablar de las manicuras en gel. Por ello, le explicaremos algunos detalles sobre estas para despejar algunas dudas. ¡Siga leyendo!
¿Por qué elegimos las manicuras en gel?
Una de las principales razones por la que solemos elegir las manicuras en gel es su excelente resultado. Un brillo insuperable que dificilmente podremos encontrar con una manicura convencional. Aunado a esto, posee una durabilidad que supera todas las expectativas. Su practicidad y rapidez, eliminando los largos tiempos de secado y ahorrándonos mucho tiempo. Además, no sufrimos porque se nos haya dañado la manicura. En realidad, son muchos los motivos para escoger este tipo de manicura.
¿Cómo funciona la manicura en gel?
Las manicuras en gel funcionan muy diferente a la clásica manicura con esmalte. Para empezar, un especialista en este tipo de tratamientos, luego de la preparación, que implica limpieza y limado de la uña, aplica un deshidratador, seguido de una capa de gel de imprimación. Luego coloca, aproximadamente, tres capas de gel de color. Cada capa de gel se fija con un período de uno a tres minutos bajo una lámpara ultravioleta (UVA).
Ese tiempo que pasan las uñas bajo la luz ultravioleta es lo que hace que la manicura en gel sea tan duradera. Ya que, fija el esmalte en gel, endureciéndolo para que se vea bonito, liso y brillante. Desafortunadamente, las manicuras en gel pueden tener un alto precio. Debido a que estas pueden duplicar o incluso triplicar el precio de una manicura convencional.
Pero, ¿son seguras las manicuras en gel?
La pregunta del millón de dólares, ¿son seguras o no las manicuras en gel? Pues bien, aunque las lámparas que se usan en una sesión de manicura en gel no son tan fuertes como las de una cama de bronceado, no son tan inofensivas como se cree. Según la Fundación de Cáncer de Piel, las lámparas de salón de uñas producen principalmente rayos UVA, que se han relacionado con el cáncer de piel y el envejecimiento prematuro.
Y aunque los riesgos de cáncer de piel pueden ser mínimos, la exposición concentrada a los rayos ultravioleta en las manos puede envejecerlas prematuramente, provocando arrugas y manchas de la edad.
¿Qué otros riesgos tienen las manicuras en gel?
Las lámparas ultravioleta no son el único factor de riesgo al hacerse manicuras en gel. El esmalte en gel que nos parece maravilloso por su larga duración, puede ser un problema. Ya que gracias a su durabilidad pueden pasar semanas antes de que notemos que algo hay algo mal debajo de él. De manera que es muy fácil pasar por alto una infección en las uñas si no se pueden ver durante algún tiempo. Corriendo el riesgo de que el problema, literal, se escape de nuestras manos.
Además, a medida que el esmalte comienza a levantarse, facilita que el agua quede atrapada debajo del esmalte en gel, convirtiéndose en un caldo de cultivo para el crecimiento de bacterias y hongos.
Por otro lado, durante el proceso de crecimiento de las manicuras en gel hay quienes suelen, quitarse el esmalte en gel desprendiendo las capas con cualquier cosa que tengan a mano. Aunque puede resultar muy satisfactorio para algunas, el mayor inconveniente es que, a medida que quitan el esmalte en gel, también están arrancando capas de su uña real. Esto puede provocar que las uñas se vuelvan quebradiza, de lo cual pueden tardar meses en recuperarse.
Y si todo eso no es suficiente, deshacerse de las manicuras en gel también puede causar daños. Eso es porque el proceso implica remojar las manos en acetona durante unos 20 minutos. La acetona seca las uñas y la exposición prolongada puede dejarlas deshidratadas y volverlas quebradizas. Algunos “especialistas” que no usan este procedimiento, sino que, peor aún, liman las uñas hasta que quitan las capas de gel. Algo que causa un daño casi irreparable en las uñas.
¿Cómo protegerse si decide realizarse una manicura en gel?
Podría decirse que las manicuras en gel de manera ocasional no son dañinas. Pero, es importante ser consciente de los riesgos y tomar medidas para protegerse. Por lo tanto, un buen consejo es usar protector solar en sus manos durante el proceso de la lámpara UVA. De esta manera, las protegerá de los rayos dañinos durante el proceso de secado del esmalte en gel.
También es recomendable aplicar un producto súper hidratante alrededor de las cutículas, como el aceite de jojoba. Este ayudara a evitar que las uñas se sequen y se vuelvan quebradizas.
En conclusión, las manicuras en gel deberían ser muy pocas y distantes entre sí, si decide hacérselas. Debemos recordar que las uñas necesitan tiempo para rehidratarse y repararse. Los riesgos que conlleva la aplicación continua de este tipo de tratamiento, no es algo que debe tomarse a la ligera.
Esto no quiere decir que nunca más se debe realiza manicuras en gel, se trata solo de hacerlo esporádicamente, en ocasiones especiales, como unas vacaciones o una festividad donde no puede realizarse los retoques habituales de una manicura convencional.
Dele a sus uñas algunos días libres de vez en cuando. Necesitan tiempo para respirar y repararse a sí mismas de los efectos del esmalte de uñas y los quitaesmaltes. Además de verse lindas y arregladas, también es importante asegurarse de que las uñas estén fuertes y saludables. Esto no es posible si su uña está constantemente cubierta de esmalte.
Las manicuras en gel ciertamente suenan bien. Pero es conveniente no abusar de ellas si queremos que nuestras uñas estén sanas. Las manos en ocasiones son nuestra mejor carta de presentación, por ello cuidémoslas y evitemos ponerlas en riesgos.
ALFA