Siga al pie de la letra nuestros consejos y verá que su hermosura y el dinero en su monedero se multiplican por mil. Tome nota de los mandamientos para ahorrar en materia de belleza.
¡Comparta! Por lo regular compramos esmaltes que usamos poco, porque su color pasa de moda o porque tenemos varios. La buena noticia es que estos cosméticos pueden compartirse, así que organícese con sus amigas e intercambien esmaltes, o bien compren uno entre todas y rótenlo para que ahorren.
Hay que economizar, por eso mejor compre “kits” de sombras, pues cuestan menos que comprarlas por separado. Igual ocurre con otro tipo de estuches, como las paletas de maquillaje o los productos dos en uno. También puede optar por un maletín de maquillaje variado.
Evite comprar productos muy grandes que quizá no se acabe. Mejor opte por productos mini, así un “gloss” conservará su textura y aroma hasta que se lo termine. Existen latas en miniatura de crema facial o cualquier cantidad productos en su versión más pequeña.
Aproveche hasta el último residuo de sus productos de belleza. Cuando ya no salga una gota más, corte los envases por la mitad. Verá que todavía le queda producto para algunos días. Si su exfoliante se terminó, póngase práctica y prepárese uno justo antes de bañarse: sólo mezcle cuatro cucharadas soperas de azúcar blanca y el jugo de dos limones.
Métase en la regadera, mójese, aplíquese la pasta y frote su cuerpo. Luego enjuáguese y báñese normal. Otro súper “tip” a la hora del baño es mezclar su champú con un poco de aceite de almendras, así humectará su cabello sin necesidad de comprar un champú costoso, más un acondicionador, más un tratamiento en crema. Por si fuera poco, su cabello quedará con un aroma delicioso.
Gym en la ciudad: Es un hecho, no hay mejor gimnasio, ni más barato, que la calle. Tome la bicicleta para ir a comprar el pan o para dar un paseo por el parque. También puede ejercitarse con una caminata a ritmo rápido durante treinta minutos, ¡active su cuerpo!
Compre productos multifuncionales. Existen productos de belleza que reúnen varias funciones en una misma fórmula: hidratan, purifican y hasta esconden imperfecciones. Si adquiere un producto así, conseguirá de una sola vez todo lo que su piel necesita.
Usar una buena brocha facilita la aplicación del maquillaje y ayuda a gastar menos producto. Búsquelas de buena calidad y para cada área: “blush”, sombras, delineador… Así no desperdiciará sus cosméticos como si los aplicara con la mano.
Elija bien su base de maquillaje. Por ejemplo, si su piel es seca, no use una para piel grasa, porque la resecará más y tendrá que recurrir a tratamientos extras para solucionarlo. También, si usa el mismo perfume a diario, cómprelo en presentación grande. Aunque es más costoso, el contenido es casi el doble y le rendirá más.
Siguiendo estos consejos, no dejará de verse radiante mientras ahorra dinero que, a largo plazo, podrá utilizar en algo que necesite. Sepa enfrentar la crisis y darle un alivio a su economía sin perder el estilo.
ALFA