Las Islas Aleutianas, son un archipiélago con una majestuosidad digna de admirar, conformada por más de 300 islas volcánicas que se extienden desde sudoeste de Alaska -Estados Unidos- hasta la península de Kamchatka en Rusia, tienen una importancia histórica relevante para la humanidad y el ecosistema.
Cuenta la historia que, estas islas fueron reconocidas a partir del año 1996, como el Sitio Histórico de la Segunda Guerra Mundial, por haberse debatido la famosa Batalla Olvidada -nombre que le adjudicaron por ser poco conocida en la historia de esta devastadora guerra mundial- a la que los japoneses invadieron dos de sus islas que luego fueron recuperadas en el año de 1943, por parte de los Estados Unidos. Representó la primera batalla en el suelo norteamericano, con un fuerte enfrentamiento y un derramamiento de sangre importante de los soldados que debatieron en esa batalla.
Su nombre proviene de la propia etnia indígena que en su momento las habitaba, conocidos como los aleuti, y que la han habitado por más de diez mil años, del total de sus habitantes, menos de la mitad son aborígenes esquimales, manteniéndose con todo los recursos que el océano les provee.
En este sentido, las heladas aguas del mar Bering que se conectan con el Pacífico Norte forman uno de los entornos oceánicos más ricos del planeta y que representan del origen de la biodiversidad de este espacio terrenal.
Si es usted de las que se siente atraída por los lugares remotos, estas islas son para usted. En cuanto al clima debe saber que llueve casi todos los días y cuando no es así, hay mucha niebla o se activa algún volcán, sin embargo, eso se compensa con la impresionante naturaleza que puede ver en esta región, cuyos colores verde marrón recuerdan al altiplano de Escocia. Así como la sensación de paz y de estar lejos del estrés citadino.
Si desea visitar alguna de estas islas, durante todo el año hay vuelos desde Anchorage; igualmente, entre los meses de mayo y septiembre, hay un ferry que navega dos o tres veces al mes desde el continente a Dutch Harbor, en Unalaska. Dicho barco necesita al menos cuatro días para el recorrido, aun cuando su llegada al destino no siempre puede garantizarse. De la misma manera, se encuentra el crucero “Silver Shadow” de Vancouver a Tokio con una escala en Unalaska y le permite hacer una parada y disfrutar de ciertos actividades.
Entre las actividades turísticas que se pueden hacer en estas hermosas islas está recoger flores, una actividad muy emotiva y contrastante en este territorio salvaje rodeado de mares helados y volcanes. Al pie de las montañas podrá encontrar lirios, altramuces y adelfillas. Otra sugerencia es visitar la iglesia ruso-ortodoxa de 1825, la cual es un templo, caracterizado por un pequeño edificio de madera blanca con dos cúpulas acebolladas verdes, situado idílicamente en la bahía de Iliuliuk. Desde allí podrá ver leones marinos sumergiéndose en el agua para cazar peces.
ALFA