El lapislázuli es una piedra milenaria compuesta por entre un 25% a un 40% de lazurita, además contiene otros minerales como sodalita, hauyna, calcita y pirita. Posee un característico color azul y su nombre proviene de la palabra árabe utilizada para el color azul. No es considerado un mineral sino una roca
Es una piedra bastante asequible por su peso en quilates y es tan popular con un cabuchón. Es frecuentemente utilizado para la elaboración de artículos de joyería como anillos, pulseras y colgantes. Frecuentemente se ve montada en plata.
Es una roca bastante suave, clasificándose su dureza entre 5 y 6 en la escala de Mohs, es sensible a la presión fuerte, así como a altas temperaturas y a productos químicos utilizados en el hogar. El lapislázuli es una piedra opaca, con un lustre vítreo y graso. Su corte es diverso y puede conseguirse en diferentes formas.
Esta hermosa piedra puede conseguirse en diferentes tonos de azul hasta llegar al violeta o el azul verdoso. Su color se debe a la presencia de azufre en su composición. En las piedras de mejor calidad el color es uniforme, aunque generalmente es manchado. Su color puede mejorarse a través de la calefacción de luz y tinte.
Otros minerales influyen en su color, la pirita le otorga un reflejo dorado, aunque la alta presencia del mineral le provoca un tinte verdoso. La calcita puede apreciarse en forma de vetas o parches en un tono azul más oscuro, aunque si predomina en la roca, el tono será azul claro. Expertos afirman que mientras menos cantidad de calcita esté presente en su composición, es de mayor valor.
Desde hace 6000 años se han explotado grandes depósitos de esta piedra y los mayores se encuentran en las Montañas occidentales Hindu-Kush, en Afganistán, de donde se obtienen las piedras de mejor calidad. Sin embargo también hay depósitos en Alemania, Angola, Canadá, Chile, Myanmar, Pakistán, Rusia y Estados Unidos
En la prehistoria, se utilizó esta piedra en joyería. Mientras que en la Edad Media se utilizó para producir un pigmento azul que se utiliza para pinturas o teñir tela. En el Medio Oriente y Europa pueden apreciarse palacios, iglesias y mezquitas con paneles de pared y columnas con incrustaciones de lapislázuli.
Simboliza la verdad y la amistad, y se le otorga la propiedad de promover la armonía en las relaciones de todo tipo. En la antigüedad y en la Edad Media, la gente tenía la creencia de que el cosmos se reflejaba en las piedras preciosas
También se le atribuyen propiedades curativas, aunque no es un asunto comprobado. Históricamente ha sido utilizada por curanderos chamanes y hombres de medicina. En la medicina alternativa se utiliza para curar el chakra de la comunicación y como activador de los centros psíquicos en el tercer ojo.
ALFA