Mucho se habla sobre el paso de Mercurio retrógrado. La combinación de estas palabras despierta alerta natural entre quienes creen en el poder de los planetas y las estrellas sobre la vida humana. No obstante, existe una verdad, muchas veces oculta, con la que su visión sobre Mercurio retrógrado podrá cambiar para siempre. Incluso, postularse como un periodo de grandioso provecho. Conózcala a continuación.
Desde la antigüedad, los planetas se han visto como regentes del destino humano, debido a que se creían que eran parte de la voluntad de los dioses. En la astrología actual, esta consideración permanece regente, de manera más básica, pero resuelve diferentes interrogantes sobre el modo de actuar, el modo de percibir, e incluso, el modo de reaccionar a diferentes situaciones.
Existe un fenómeno particular, relacionado con el movimiento de los planetas y su imposición sobre el designio de toda vida sobre el Planeta Tierra. Este es la retrogradación. Un proceso que se caracteriza cuando un planeta parece detener su movimiento, para luego entrar en una fase de aparente retroceso. Dentro de la astrología, este fenómeno se relaciona con la inhibición de los conceptos que, según las creencias antiguas, están regidos por ese planeta.
Uno de los mayores fenómenos de retrogradación que hace casi detener a la población es el señalado con Mercurio. Para la astrología, Mercurio refiere a los principios de la comunicación, la racionalidad, la variabilidad y la adaptabilidad. De igual forma, Mercurio ostenta poder sobre las relaciones sociales cercanas de un individuo.
De tal manera, entiendo el proceso de retrogradación y el valor de Mercurio para la astrología, pasa a señalarse que cuando ocurre Mercurio Retrógrado este se considera como un periodo de retroceso debilitador de las comunicaciones, la lógica e incluso, la tecnología.
Cada 3 meses ocurre un Mercurio Retrógrado, viéndose relacionado con el periodo de tiempo para llevar a cabo proyecto, para entrar en periodos de evaluación, para mirar atrás y re-planificar el siguiente periodo trimestral, y así, tomar las decisiones pacientemente analizadas para poder realizar un cambio, solo de ser necesario.
En pocas palabras con Mercurio retrógrado se debe detener y transformar. La atención a todo lo que sucede debe estar activada. La impulsividad debe irse a dormir, pues tomar decisiones precipitadas es una acción tan inteligente como comerse la luz de un semáforo en rojo.
La astróloga, Andrea Caricatto, enseña que Mercurio retrógrado no representa un mal momento, sino que es un periodo propicio para hacer gala del análisis medido y la precaución, tal como debe hacerse con un proyecto, o en las diversas etapas de la vida.
“Mercurio retrógrado nos recuerda que debemos terminar los asuntos que traemos entre manos antes de comenzar otros. También, en este período, nos volvemos más intuitivos, receptivos y reflexivos, y resulta provechoso para revisar contratos y re-examinar situaciones. La astrología considera éste un periodo natural para re-examinar, re-visar y re-hacer las cosas ya iniciadas, en preparación para el siguiente período de movimiento directo.”
ALFA