La creación en el árbol de la vida refiere al significado base de este símbolo propio de múltiples culturas y en múltiples credos. Entendido como el origen de varias mitologías, el árbol de la vida también es conocido como el árbol sagrado, enmarcado en los preceptos filosóficos y tradiciones religiosas que han fundamentado al ser humano desde sus inicios.
Reconocido como el árbol del conocimiento, que conecta al cielo con el inframundo, o también, conectando a cada ser vivo o forma de creación bajo el árbol del mundo, los retratos cosmogénicos de este símbolo son un crisol de creencias que plantean la unión como premisa fundamental de la existencia humana.
En la mitología persa, el árbol de la vida se entiende dentro de la historia de ‘Haoma’, fruto que resguarda todas las semillas y que intentó ser acabado por ‘Ahriman’, espíritu que encarga los malos pensamientos humanos. Intentando destruirlo, ‘Ahriman’ quiso que una rana invadiera el árbol para poder prevenir que la Tierra tuviese frutos de la naturaleza. En respuesta, el Dios ‘Ahura Mazda’ ordenó a dos peces que resguardaran por siempre al árbol de la vida.
Los persas entienden a ‘Ahriman’ como el origen de la muerte y todos los males existentes, mientras que ‘Ahura Mazda’ es responsable del origen de la vida, y de todo lo bueno existente sobre la Tierra; visión primaria que tiene la humanidad sobre la existencia del bien y del mal en un mismo plano.
Para la astrología, el árbol de la vida es una expresión importante para la compresión del cábala, doctrina que lo establece como la manera de comprender la creación de Dios, considerándolo como parte fundamental de la cosmología cabalística. Además, el árbol de la vida también se utiliza en el cristianismo, paganismo y hermetismo para descubrir aquellos preceptos divinos que explican el origen del mundo tal como se le conoce en la actualidad.
La expresión “Árbol de la vida” se plantea incluso más allá del sentido espiritual. Fue en 1872 cuando el naturalista inglés, Charles Darwin, reconocido científico que planteó el cambio hereditario como inicio de las diferentes especies de seres vivos en la Tierra mediante la selección natural. En el caso del árbol de la vida, Darwin acuñó este término como metáfora para hacer referencia al árbol filogenético, enmarcado en torno al sentido hereditario de cada nueva generación de especies.
En la actualidad, el símbolo de creación que representa el árbol de la vida también ha entrado en la cultura popular. Desde la música, con muestras de rap o rock pesado; hasta la arquitectura y la ficción, mediante muestras literarias, películas e incluso, videojuegos.
En definitiva, el árbol de la vida se mantiene con un peso incomparable conforme al resto de representaciones gráficas estudiadas por el ser humano, pues más que usarle como una imagen más, el árbol de la vida contiene en su estructura uno de los misterios que el hombre ha mantenido prioritario por descubrir: su mismo origen.
ALFA