La constelación de Leo es la quinta del zodíaco y una de las más brillantes junto a la de Tauro, el mejor momento para observarla en el año es en la época de la primavera, esta constelación representa al León de Nemea, conozcamos su historia.
Una constelación que se divisa fácilmente en el cielo, se asemeja a un león agazapado mirando hacia el oriente, la cabeza y la melena del león se pueden ver gracias a una hoz de estrellas que tienen forma de una interrogante invertida; las principales estrellas que forman esta constelación son Regulus o Cor Leonis, que significan pequeño rey o corazón de león; Denébola, que significa cola del león y Algieba que significa frente, esta última representa un sistema binario formado por dos estrellas gigantes.
Para la mitología, la constelación de leo corresponde al león de Nemea, quien era hijo de Tifón y Equidna, esta bestia mitológica era poderosa e indestructible, devoraba a las personas y al ganado, propagando zozobra y terror en los campos.
Zeus le dio la tarea de matarlo a su hijo Hércules, fue uno de sus primeros trabajos y le resultó muy complicado matar al animal, la piel del león era impenetrable, no existía algún arma que pudiera herirlo, entonces Hércules definió su estrategia de ataque acorralando al animal en su guarida, la cueva tenía dos entradas, una de ellas fue totalmente bloqueada, por la otra llegó Hércules para sorprender a la fiera, lo abrazó con firmeza y después de un largo combate lo apretó hasta estrangularlo.
Para completar la misión debía quitarle el pelaje y como no podía Atenea le dio la idea de utilizar las garras del propio animal, el pelaje lo llevó como armadura y la cabeza como casco; para honrar el acto de su hijo, Zeus decidió colocar al león dentro de las constelaciones.
En el Museo del Prado, en Madrid hay una obra que muestra la lucha de Hércules y el león, corresponde al lienzo de Francisco de Zurbarán y lleva por nombre “Hércules lucha contra el león de Nemea”.
De esta historia es fácil entender por qué los leones son los reyes entre los humanos y el mundo animal, por algo es el signo más dominante del zodíaco, actúan con independencia y muestran total seguridad en sus capacidades, establecen sus prioridades y ponen todo su empeño para conseguir el objetivo, son líderes innatos, generalmente todos le siguen y confía en sus aptitudes y cualidades.
Sus defectos son tan grandes como sus virtudes, suele ser muy terco en sus creencias y no escuchar a los demás lo puede llevar al fracaso en alguna de las metas propuestas, su gran energía y espíritu dominante hace que en ocasiones adopte aires de superioridad y prepotencia.
Cada constelación tiene una historia de la que puede sacar sus propias conclusiones sobre sus rasgos y características más destacadas, comprendiendo la historia de la constelación de leo, puede relacionar sus mayores ventajas y debilidades.
ALFA