La joyería prehispánica en América ha dejado hallazgos importantes que han influido en el mundo de la joyería de hoy día, y que deben ser valorados por todas las civilizaciones a través del tiempo; que han tenido la costumbre de adornar sus cuerpos de alguna manera. Desde la selección de materiales, hasta la fabricación de un objeto, así como atribuirle significados y ritos, el adorno es una actividad relacionadas a la capacidad de crear y con ello distinguirse de los demás, y con ello, entender la necesidad de identificarse como tribu.
![joyería prehispánica de América](https://www.joya.life/wp-content/uploads/2019/08/La-joyería-prehispánica-en-América-1.jpg)
Los materiales más valorados para la joyería prehispánica fueron el jade, turquesa y la serpentina, a las que se atribuían propiedades mágicas y otros simbolismos. El jade es uno de los materiales más hermosos y que estuvo presente en las joyas prehispánicas, utilizándose sobre todo por la élite social y como ofrenda para los dioses. Además, el ópalo estaba entre las piedras preciosas más usadas en los collares, pulseras, narigueras, pendientes y bezotes; los joyeles, eran piezas que colgaban de los cuellos de individuos, pertenecientes a la nobleza y sacerdotes.
Es por ello, que a través del tiempo la joyería prehispánica fue evolucionando en la adopción de técnicas y métodos que lograsen realzar y adornar el cuerpo humano, con la intencionalidad de resaltar la individualidad, la pertenencia a un grupo social determinado, así como indicativo de género, estado civil y edad, como por ejemplo se hace en la actualidad al contraer matrimonio, cuando cada cónyuge se coloca su anillo como símbolo indicativo de estar casados.
Es así como, la joyería prehispánica de las civilizaciones antiguas, se caracterizó por diseñar y elaborar joyas que seguían ciertas pautas de utilización, dentro del contexto de las tradiciones artesanales que en ese momento estaban establecidas según los criterios de los que manejaban este ámbito. Por tanto, se puede decir que todo el proceso estaba dirigido a cumplir una función social y a transmitir significados; desde la misma selección de las materias primas para elaborar los diseños, el tamaño, la forma, el tamaño, etcétera.
Dentro de los materiales de mayor relevancia en la joyería prehispánica, estaba el metal, ya que para las sociedades antiguas era un símbolo de transformación, continuidad y regeneración, que se transmitía a cada pieza que se elaboraba; por lo que mayormente se observa que los diseños casi siempre se relacionaban con poderes mágicos; los cuales eran transferidos a sus dueños mediante rituales y ceremonias religiosas, que hacían de las joyas más que un objeto decorativo, un elemento con energía propia.
Cada uno de estos aspectos se conocen, gracias a una fuente de información muy importante, como lo es el “Códice Florentino”, el cual fue escrito entre 1548 a 1561 por artesanos indígenas; donde se registraron datos sobre la joyería de estas civilizaciones, como parte del acervo cultural entregado a Fray Bernardino de Sahagún.
Dentro del tipo de objetos de la joyería prehispánica que se elaboraban con mayor frecuencia, estaban las máscaras esculpidas con madera revestida de mosaicos muy finos, con obsidiana, turquesa y conchas; las cuales eran utilizadas en las ceremonias funerarias, y eran parte importante de la tradición y del significado social que se nutría de simbologías como, por ejemplo, los bezotes o piercing que atraviesan el labio o sus cercanías, representando la jerarquía masculina.
Definitivamente estos objetos fueron importantes en la joyería prehispánica, por lo los elaboraban con sumo cuidado, al disponer varillas de metal u otra sustancia, en una cámara cilíndrica y en las puntas llevaban cabezas de animales como serpientes y águilas, para que los miembros de algunas tribus los utilizasen como símbolo de masculinidad y poder.
Es así como, muchos de los descubrimientos arqueológicos que se han logrado, han demostrado que la esta joyería es rica en técnicas de una orfebrería suprema; comprobándose que estas civilizaciones elaboraron diademas con adornos en piedras como la turquesa, plumas de oro, entre otras. Además, en la joyería prehispánica uno de los procedimientos más usados, fue la antigua técnica de la cera perdida, la cual permitía realizar grandes diseños moldeados.
Es bueno acotar que, la turquesa fue altamente apreciada por estas civilizaciones, y se convirtió en la piedra semipreciosa preferida para la elaboración de objetos artísticos y litúrgicos; que requería del calentamiento de las piedras por sus complejos procesos de elaboración.
Por otra parte, la joyería prehispánica hacía uso de materiales como la cera de abejas y el copal blanco para elaborar las joyas; así como de cascabeles que usaban para adornar algunos diseños y para proveerlos su sonido armonioso y su toque especial; en diversas joyas de formas circulares, rectangulares, cuadradas, en forma de gancho, elaboradas en minerales como el oro y la plata; las cuales se usaban generalmente insertándose en el lóbulo de la oreja.
Cada uno de estos vestigios de la época prehispánica forman parte del bagaje cultural que a través de la historia se ha venido preservando, y que hoy día ha encontrado apoyo en diseñadores famosos que usan algunos detalles de este tipo de joyería en sus colecciones.
ALFA