El mundo de la joyería es para muchos un mundo inexplorado, del que se conoce sólo la punta del iceberg, es decir, lo que se ve en las joyerías, en la realeza y en las pasarelas de moda. Pero este mundo ha crecido y sigue creciendo en torno a este arte, tanto así que anualmente hay ferias internacionales de joyería como la Joya Barcelona, que es una feria particular en la que se mezclan la joyería con el arte y la pintura.
La feria Joya Barcelona, es una iniciativa que comenzó en el año 2008, con 14 artistas en el Hotel 1898 en Las Ramblas, España, como un evento local con artistas españoles que con el paso de los años se convirtió en un punto de encuentro internacional de creatividad. Su director Paulo Ribeiro es un arquitecto de origen brasileño que reside en España desde hace 15 años. Él se encarga de organizar ferias por países de Europa como París, Florencia, Berlín y Basilea a Ámsterdam.
Esta feria se creó con la finalidad de mostrar al mundo lo que se conoce como joyería artística actual, sus nuevas técnicas, materiales y percepciones de la joyería de hoy. El proceso de experimentación hace de esta disciplina una obra muy personal, en la que cada artista se expresa y comunica a través de sus piezas.
El tipo de joyería presente en esta feria escapa por completo de la joyería, comercial, tampoco alcanza a la alta joyería y mucho menos al mundo de la artesanía; a este tipo de joyería se le llama: artística. Es decir, que apunta incluso a un público diferente, pues son personas que saben apreciar el valor del arte por encima del comercial o de una gema preciosa. Podría catalogarse como una joyería de autor, contrario completamente a lo que se conoce.
La joyería artística es una disciplina desconocida por gran parte de la gente y que no se basa en la moda, sino en ideas y conceptos de vanguardia. La décima edición se llevó a cabo los días 4, 5 y 6 de octubre 2018, en el Disseny HUB Barcelona. Para esto hacen convocatorias individuales, a galerías, a colectivos y a escuelas tanto nacionales como internacionales.
Finalmente, cada edición posee un concepto diferente, en la edición del 2016 se combinó este arte con la pintura, dándoles a los distintos joyeros participantes como inspiración las pinturas del artista reconocido español Ramón Casas, lo cual fue arte en su máxima expresión. Sin duda una feria que vale la pena visitar si usted es amante del arte y la joyería.
ALFA