Es increíble como el jade forma parte de casi todas las cosas que hacemos hoy día. ¿Quién podía imaginar que también lo estaría en una rama de la salud? Pues sí, increíblemente, el jade, desde hace muchos años, era utilizado en la odontología. Los mayas y su interés por todas las cosas que pudieran mejorar el ser, fueron unos de los primeros en incluir la gran piedra de jade como incrustaciones en las piezas dentarias.
Los mayas dieron lugar a los primeros descubrimientos odontológicos; y, aunque éstos no tuvieran ni la menor idea de cómo se llamaba lo que hacían, dieron grandes aportes en el desarrollo de la salud dental. Esta magnífica historia empezó hacia los lados de Yucatán, México, donde diversas costumbres y tradiciones de la civilización era el no consumir azúcares y lavarse los dientes después de la ingesta de alimentos. Quizá, a raíz de esto, fue que tomamos en cuenta al azúcar como el peor enemigo de nuestros dientes, lavándolos después de cada comida.
Aunque el sumo cuidado que tuvieron con sus dientes dio grandes pasos a la odontología, no se salvaron de sufrir caries en tiempo tan remotos. Claro está, las diversas bacterias que viven en nuestra boca, también deberían ser eliminadas para poder evitar un mal como este. Aunque tuvieran una dieta blanda, la gran cantidad de carbohidratos dio pie al aumento de bacterias causantes de caries.
Los mayas eran personas muy curiosas y su creatividad empezó a darles tantas ideas, que comenzaron a practicarlas con sus dientes; entre estas, estuvo la de darle forma de sierra a los dientes con piedras, que poco a poco iban dañando, de manera abrupta, la capa más externa de su dentadura.
Tenían fama de ser los primeros en realizar incrustaciones con piedras preciosas en los dientes, sin ninguna razón médica. Para ellos, estas incrustaciones las realizaban netamente con fines estéticos; también se creía que estas prácticas eran religiosas y de gran avance tecnológico para la época, notándolo en cada una de las piezas dentarias que trataron los arqueólogos en sus estudios.
Gracias a estas incrustaciones pudieron dar información sobre sus ideologías, religiones y jerarquías, a aquellos historiadores con profundo interés en esta civilización. Estos engastes de jade eran realizados de una manera bastante agresiva y podía observarse con solo ver los bordes de los incisos de los dientes anteriores y las caras proximales de los posteriores.
Todo esto se hacía bajo creencias antiguas sobre el alma y el aliento. Estaba reducido a personas de alto rango. Las incrustaciones de jade fueron un gran descubrimiento para la odontología de este siglo. ¿Se atrevería usted a llevar una incrustación en jade como esta?
El jade es sin duda alguna una piedra poderosa con grandes usos.
Qué costosa saldría una incrustación en la actualidad de una piedra preciosa.
Primeras incrustaciones en el mundo y hecha por los mayas.
Encantada con este tema tan interesante.
Los primeros en realizar la práctica odontológica, quién iba a pensarlo.