En la provincia de Shanxi, en China, se encuentra una de las cinco montañas sagradas del taoísmo, la imperturbable Hua Shan. Este peligroso y admirable lugar es una atracción turística por excelencia, donde arriesgados visitantes ascienden a su cima, con la emoción de vencer las alturas, llegando hasta el templo.
Es una experiencia indescriptible que le apasionará desde el principio; si no le tiene miedo a las alturas, puede probar aventurarse abriéndose paso por esta magnífica región. No obstante, muchas partes del sendero deberían ser recorridas por personas especializadas en escalada.
En este sentido, atreverse no es cosa fácil; necesitará de mucha valentía, ya que los comentarios no son halagadores. A menudo se escuchan rumores de accidentes ocurridos, arrastrando grandes cantidades de muertes; mientras otros opinan lo contrario, afirmando que existen medidas de seguridad para llevar a cabo este episodio.
En todo caso, son sucesos que no se confirman, debido al fuerte hermetismo de las autoridades del lugar. No obstante, ocultar algo de esa magnitud tampoco es factible; ya que cada año el sitio es concurrido por casi dos millones de visitantes, pero, además, existe la opción de llegar en teleférico, evitando subir por las difíciles y empinadas paredes de la montaña, con escaleras, cadenas y tablas sostenidas apenas por la dura roca.
Durante el temerario ascenso se encontrará con un camino vertical acantilado llamado “Changong Zhandao”, considerado el más peligroso de todos, con cuatro metros de largo por treinta centímetros de ancho, donde solo puede haber pasos firmes; porque uno en falso es por demás imprudente. Otro espacio temible es conocido como “Dragón Negro”, con un área de ochenta centímetros de altura, pero con caída de seiscientos metros por cada extremo; luego, hay que avanzar con el apoyo de viejas cadenas, llegando a la “Garganta de los cien escalones”, con pequeñas gradas encajadas en la piedra, para subir a lo más alto.
Llegar a la cumbre es maravilloso, allí se extasiará contemplando el majestuoso paisaje de las cinco montañas sagradas, que se erigen como una hermosa flor abierta a su fantasía. Esa fue la impresión que se llevó el periodista y realizador de documentales Daniel Landa, oriundo de España, cuando efectuó una excursión con el propósito de subir la montaña grabando toda la travesía; en colaboración con la Televisión Española, un suceso que logró con éxito, poniéndolo a temblar de pies a cabeza.
También hay historias que relatan que antiguamente existía una mujer de jade por esos montes, montando un caballo blanco. Además, en la base de la montaña, se encuentra la fuente de jade en honor a “Chen Tuan”, un legendario taoísta; esta bella gema es inspiración de devoción y religiosidad entre los habitantes de la provincia, marcando con gran misticismo estas recónditas tierras. En el canal “YouTube” “francisco barba”, le invitamos a ver el sendero de Hua Shan.
Sin duda, este trayecto le resultará emocionante de principio a fin, no solo por la hermosura del lugar, sino por el reto de afrontar el provocador peligro, encontrando una desafiante aventura.
ALFA