EXFOLIADORES PARA LA PIEL

Los exfoliadores son una excelente alternativa para darle luminosidad a la piel, además de limpiarla y prepararla para una buena hidratación. Pues, de esto se tratan los exfoliadores, de retirar células muertas que roban la luminosidad natural a la piel e impiden que ésta respire.

Es recomendable exfoliar la piel por lo menos una vez cada quince días, aplicando productos de calidad y que se adapten a la piel. En el mercado existen varios productos para las exfoliaciones, tales como: jabones líquidos, gel para baño, mascarillas e incluso cremas para limpieza profunda; es muy fácil reconocerlos porque tienen pequeñas partículas notables a simple vista, que permiten realizar la exfoliación al contacto con su piel.

Es también importante que procure no conseguir productos muy fuertes, porque podrían enrojecer la piel. A la hora de bañarse use agua tibia, extienda el producto y masajee de forma suave, con movimientos circulares y en dirección ascendente.

Es necesario que considere el tipo de piel, para así hacer uso correcto del exfoliante, y evitar no ser afectada. A continuación se presentan distintos tipos de piel, preste atención a la suya y considere el uso correcto del exfoliante para ella:

Piel seca: Es necesario que antes de hacer uso del exfoliante pueda aplicar una crema humectante para ir preparando la piel, de modo que cuando aplique el exfoliante no se agriete más de lo que ya está. Cuando aplique el exfoliante, es necesario que lo mezcle con un poco de agua, y con suaves masajes ir limpiándola. Si puede comprar un exfoliante para este tipo de piel, sería lo ideal.

Piel grasosa: Este tipo de piel normalmente es la que vive afectada por el acné o por los resultados propios de la contaminación; es necesario que mantenga un tratamiento de limpieza para ella, y use los exfoliantes para complementar la  higiene de la misma. Para este tipo de piel debe aplicar con más frecuencia los exfoliantes; puede usarlo una vez por semana. En el caso de la cara, aplíquelo acompañado de astringente o tónico; y en el caso del cuerpo, puede aplicar cremas que complementen el trabajo del exfoliante.

Piel sensible: Para este tipo de piel debe ser muy cuidadosa y delicada al momento de aplicar los exfoliantes, para no irritarla y enrojecerla. Puede aplicar exfoliantes naturales a base de avena, azúcar, miel, entre otros. Una vez que lo aplique, observe la reacción de la piel, qué apariencia tiene.

Normalmente después de exfoliar la piel, ésta puede reflejar una apariencia de agresión o brote, pero eso es normal. Es solo porque hubo un estremecimiento de células muertas, pero al transcurrir los minutos, usted misma se dará cuenta del cambio positivo que ofrecerá, además de estar muy limpia.

Una vez que haya considerado el uso correcto de los exfoliantes en cuanto a su tipo de piel, le invitamos a que ponga en práctica este método de bienestar y belleza, el cual le ayudará a tener una piel suave, luminosa y libre de grasa.