Usar tacones es uno de los placeres femeninos por excelencia. Pero, su uso también está relacionado con incomodidad y dolor, aún cuando no siempre se debe al tipo de calzado, sino a los errores que cometemos al comprar tacones. Estos se relacionan con la elección de una talla inadecuada o con la falta de tiempo para asegurarnos de que el zapato realmente le vaya a nuestro pie, esto último suele suceder con más frecuencia en la actualidad, gracias al incremento de las compras por internet. A continuación conoceremos los hábitos que nos separan del tacón perfecto.
Desconocer la forma del pie
Aunque parezca extraño y más allá de la parte estética, no todos los zapatos van al mismo tipo de pie y más cuando se trata de tacones. Para conocer la forma del pie se puede ir a un especialista o guiarse por descripciones disponibles en Internet. Lo importante es saber qué tipo de zapatos nos favorecen y cuáles ocasionan daños. Por ejemplo, las plataformas le van mejor a las chicas de pie plano y no a las chicas con pies arqueados.
No escoger la talla correcta
Después de escoger un modelo que no nos favorece, este podría ser catalogado como el segundo gran error a la hora de comprar tacones. Sin lugar para titubeos, la talla correcta es la talla correcta: no valen tacones más grandes o más pequeños, aunque nos encante el modelo, debemos tomarnos nuestro tiempo y escoger el número exacto.
No probarse los tacones
La compra de tacones requiere una inversión de tiempo. Una vez escogido el modelo, este se debe medir y caminar unas cuantas veces por la tienda hasta estar seguras de que es el adecuado. Lo mejor es hacer la compra, estando seguras de lo que estamos llevando, sin caer en el error de pensar que esos tacones nos quedaran mejor con el paso del tiempo.
No pensar en la comodidad
Cuando nos dejamos llevar por los caprichos o la influencia de la moda podemos gastar en unos zapatos extravagantes y con un tacón más alto de lo normal, solo para darnos cuenta, al poco tiempo, de que no podemos con ellos. Antes de comprar un tacón debemos pensar en qué tipo de situaciones lo utilizaríamos y es ahí donde sabremos si vale la pena o no.
Medirse los zapatos con el pie lastimado
A la hora de comprar zapatos, debemos asegurarnos de hacerlo cuando nuestro pie esté en las mejores condiciones. Esto quiere decir que no estén hinchados o curados de algún golpe reciente, ya que por lo general es cuando están más gruesos y nos hacen cometer errores en la elección de la talla.
En definitiva, los tacones son un símbolo perfecto de la femineidad y sensualidad en las mujeres; por lo que bien vale la pena evitar todos los errores que cometemos al comprarlos, para así poder lucirlos en todo su esplendor, dejando nuestra huella en cada paso que damos.
ALFA