Cuando se trata de poner en práctica nuestros hábitos de belleza existen pautas para resaltar nuestros atributos y evitar cometer los errores de belleza más comunes, esos que nos hacen cuestionarnos y preguntarnos qué hicimos para que el look soñado no saliera como lo esperábamos.
Los errores de belleza más comunes suelen ser detalles sencillos que pasamos por alto a la hora de maquillarnos, peinarnos y vestirnos, y aunque se trata de nimiedades o rutinas aparentemente sin importancia, estas realmente marcan la diferencia a la hora de lucir perfectas.
Algunos de los errores de belleza más comunes son:
Usar productos no indicados para la piel: los productos de la piel y sobre todos los de la piel del rostro deben utilizarse previa consulta a un especialista, ya que cuando se usan fórmulas contrarias, la piel reacciona a los componentes, dejándonos con brotes de alergia, granos y manchas.
No desmaquillarse: este error es ampliamente conocido, pero bien sea por pereza, cansancio o cualquier otra excusa muchas caemos en él. No desmaquillarse causa arrugas prematuras en la piel, obstrucción de los poros y acné, consecuencias que no valen la pena y se pueden corregir con 3 minutos de deslizar un algodón con desmaquillante sobre la piel.
Eliminar el vello en la dirección incorrecta: ¡Fatal! Este error afecta terriblemente la apariencia de la piel, ya que deja como huellas, esos molestos puntitos oscuros que afean la apariencia de la piel.
Aplicar el corrector en forma circular: el corrector es un paso del maquillaje que sirve para disimular las ojeras y otras imperfecciones en la piel. Este se debe aplicar en forma de triángulo debajo de los ojos y en un tono igual al de nuestra piel; el error habitual es aplicarlo en un tono más claro y en forma circular, con lo cual solo obtenemos la apariencia de un mapache.
Usar colores incorrectos: todas tenemos una gama de colores que nos favorece según nuestro tipo de piel y lo ideal es sacar provecho de ellos al vestir o maquillarnos. No usar todos los colores de la paleta cromática no significa negarnos a probar cosas nuevas, solo que en este caso, no vale la pena arriesgarnos cuando ya las teorías del color han sido suficientemente claras.
Criticarte frente al espejo: una cosa es evaluarnos un par de veces antes de salir a la calle y otra es pasar tiempo criticando o deseando tener características que la naturaleza no nos concedió; este hábito solo genera frustración y nos aleja del objetivo final de toda práctica de belleza, que es resaltar nuestras cualidades y disimular nuestros defectos.
Usar productos vencidos: los productos de cosmética tienen fecha de vencimiento y no reparar en esto, solo hace que terminemos usando productos que dañen nuestra piel y por ende afecten nuestra salud. Cada tipo de producto tiene su ciclo de duración: las máscaras de pestañas se deben renovar cada 6 menes, mientras que los polvos y bases, cada año.
Conocer los errores más comunes de belleza es la mejor forma de mantener una apariencia impecable y evitar consecuencias negativas tanto en nuestra apariencia como en nuestra salud.
Los errores de belleza más comunes suelen ser detalles sencillos que pasamos por alto a la hora de maquillarnos, peinarnos y vestirnos, y aunque se trata de nimiedades o rutinas aparentemente sin importancia, estas realmente marcan la diferencia a la hora de lucir perfectas.
Algunos de los errores de belleza más comunes son:
Usar productos no indicados para la piel: los productos de la piel y sobre todos los de la piel del rostro deben utilizarse previa consulta a un especialista, ya que cuando se usan fórmulas contrarias, la piel reacciona a los componentes, dejándonos con brotes de alergia, granos y manchas.
No desmaquillarse: este error es ampliamente conocido, pero bien sea por pereza, cansancio o cualquier otra excusa muchas caemos en él. No desmaquillarse causa arrugas prematuras en la piel, obstrucción de los poros y acné, consecuencias que no valen la pena y se pueden corregir con 3 minutos de deslizar un algodón con desmaquillante sobre la piel.
Eliminar el vello en la dirección incorrecta: ¡Fatal! Este error afecta terriblemente la apariencia de la piel, ya que deja como huellas, esos molestos puntitos oscuros que afean la apariencia de la piel.
Aplicar el corrector en forma circular: el corrector es un paso del maquillaje que sirve para disimular las ojeras y otras imperfecciones en la piel. Este se debe aplicar en forma de triángulo debajo de los ojos y en un tono igual al de nuestra piel; el error habitual es aplicarlo en un tono más claro y en forma circular, con lo cual solo obtenemos la apariencia de un mapache.
Usar colores incorrectos: todas tenemos una gama de colores que nos favorece según nuestro tipo de piel y lo ideal es sacar provecho de ellos al vestir o maquillarnos. No usar todos los colores de la paleta cromática no significa negarnos a probar cosas nuevas, solo que en este caso, no vale la pena arriesgarnos cuando ya las teorías del color han sido suficientemente claras.
Criticarte frente al espejo: una cosa es evaluarnos un par de veces antes de salir a la calle y otra es pasar tiempo criticando o deseando tener características que la naturaleza no nos concedió; este hábito solo genera frustración y nos aleja del objetivo final de toda práctica de belleza, que es resaltar nuestras cualidades y disimular nuestros defectos.
Usar productos vencidos: los productos de cosmética tienen fecha de vencimiento y no reparar en esto, solo hace que terminemos usando productos que dañen nuestra piel y por ende afecten nuestra salud. Cada tipo de producto tiene su ciclo de duración: las máscaras de pestañas se deben renovar cada 6 menes, mientras que los polvos y bases, cada año.
Conocer los errores más comunes de belleza es la mejor forma de mantener una apariencia impecable y evitar consecuencias negativas tanto en nuestra apariencia como en nuestra salud.
ALFA