Hace unos años, la ciudad japonesa de Fukushima sufrió uno de los peores desastres nucleares de la historia. La radiación a la que han sido expuestas muchas especies desde entonces, muestra el poder destructivo de la misma.

Un pescador japonés se encontró un aterrador pez cerca de la planta de Fukushima. Una espeluznante foto de un pescador con la criatura en las manos, ha hecho renacer las especulaciones sobre las consecuencias que el accidente nuclear de Fukushima ha tenido en la fauna marina, y es que muchas de las especies capturadas en la zona superan el límite legal de radiación en 2.500 veces, trayendo de vuelta la concienciación sobre los riesgos de las fugas nucleares. Algunos apuntan a que el escape radioactivo que se produjo en Fukushima en el año 2011, es el causante de modificaciones genéticas en los animales.

El pescador japonés, Hirasaka Hiroshi, famoso en las redes por las fotografías de sus extrañas capturas que después ingiere, ha colgado en su perfil en la red social su último hito. Se trata de un pez lobo capturado en las costas de la isla de Hokkaido, en Japón. El animal mide casi dos metros y pesa aproximadamente 15 kilos,  se cree que es un pez lobo. Estos vertebrados acuáticos viven comúnmente en los océanos Pacífico y Atlántico, se alimenta de especies más pequeñas, y suele tener un tamaño medio de 1.2 metros de longitud y son reconocidos por su gran tamaño y por su temible aspecto.

Según Wikipedia, el pez lobo (Anarhichas lupus) pertenece a la familia de los anarichádidos. Llega al metro y medio de longitud, cuerpo cilíndrico en su parte delantera y aplanado en la parte caudal. De piel suave y resbaladiza, con las escamas casi escondidas en la piel. La aleta dorsal se extiende por casi toda la espalda de forma similar a la aleta anal, sus dientes están muy bien desarrollados y los distingue de otros miembros de la familia: son cónicos en la parte frontal de la mandíbula, en forma de molares en los costados; es común en las aguas poco profundas de las costas, es un depredador nato. El sabor de su carne está haciendo que en los últimos años se produzca un aumento del interés en el consumo de este pez.

Según las primeras informaciones, el pez habría sido pescado en Fukushima, aspecto desmentido por el pescador. Este dato erróneo ha creado mucha polémica, ya que muchos comenzaron a hablar del terrible y aterrador pez mutante. Sin embargo, el propio pescador aclaró horas después que el pez no había sido pescado en aguas de Fukushima, y que además, su extraordinario tamaño suele ser habitual en la zona donde fue pescado.

El impresionante pez lobo posee unas enormes fauces y se asemeja más a una criatura sacada de una película de ciencia ficción; lamentablemente, también se han dejado oír muchas opiniones contra el pescador al que acusan de montar una imagen para atemorizar.

 

ALFA