Es muy fácil que otros vengan a darnos consejos para eliminar los pensamientos negativos de nuestra vida, ciertamente podemos escuchar y hasta aplicar estos «tips» pero todo radica, no en lo que nos pasa, sino en nuestra perspectiva, en como vemos lo que nos esta pasando y que tan determinados estamos en cambiarlo, en cambiar la forma en que permitimos que esos pensamientos negativos nos invadan y no nos dejen avanzar. El problema no es tener miedo, pues eso es normal, el problema esta es cuando nos dejamos llevar por esos miedos. Es necesario que aprendamos a enseñarnos a gobernarlos hasta dominarlos o incluso a eliminarlos de nuestra vida. Y ¡si podemos lograrlo!
Debemos acudir a una fuente de vida que nos llene de fe y esperanza sin importar el entorno que nos rodee y entender que la libertad que necesitamos radica en nuestro interior, en nuestros pensamientos. Normalmente esos pensamientos negativos que vienen a nuestra mente son por cosas que no hemos logrado o por situaciones que vivimos, pero que diferente fuese si viéramos cada una de estas cosas no como piedras que la vida nos tira para tapiarnos, sino como piedras que formaran el escalón para llegar a un lugar más alto.
Tal vez hemos pasado décadas teniendo pensamientos negativos pero es momento de detenernos a pensar a donde eso nos ha llevado, tal vez nos han estancado en el tiempo e incluso nos han llevado a no disfrutar lo que realmente vale la pena. Pensamos que debemos vivir ganando, si, las victorias son necesarias, pero también las derrotas y no debemos afligirnos por ellas, al contrario debemos pensar que la valentía siempre traerá cicatrices. Esta será una batalla de toda la vida pero lo que nos dará la victoria es ser persistente y cumplir con esa asignación que tenemos en la vida, aun con el montón de errores que podamos tener.
Muchas veces esos pensamientos negativos vienen a nuestra vida porque tratamos de entender verdades que incluso nos quieren inculcar, pero que pasa si empezamos a ver la verdad no como algo que se deba entender sino como algo que se recibe, es decir, no se entiende en la mente, sino que se recibe en el corazón; para eso debemos trabajar en olvidarnos de lo que nos hirió y ensanchar nuestro corazón, no debemos afanarnos en dejar de ver lo malo que nos pasa sino debemos empezar a enfocarnos en las cosas buenas de esa situación. Toda situación tiene una salida, debemos buscar la estrategia para encontrar la solución.
Es importante saber que el que anda con sabios sabio será. Así que, una de las formas de eliminar estos pensamientos es evaluando ¿de quién estas rodeado?, de personas que ven más allá de las cosas o de personas que todo lo complican. Debemos determinarnos a progresar en la vida, ir de gloria en gloria, como la luz de la aurora que va en aumento hasta que el día es perfecto.
Es verdad, hay que aprender a dominar nuestros miedos y no dejar que estos lo paralicen a uno
es dificil pero hay que intentarlo gracias