Los vikingos, eran excelentes orfebres procedentes de Escandinavia, región al Norte de Europa; formada por Noruega, Suecia y Dinamarca. Su artesanía data de los siglos VIII al XII, cuando se inspiraron en creencias míticas para elaborar joyas; reflejando a través de ellas la fe de su cultura en múltiples dioses, con el anhelo de alcanzar suerte, fuerza y sobre todo sabiduría.
El dios más importante de la mitología nórdica era Odín, representado por un lobo y dos cuernos que confeccionaban con materiales como el oro y la plata; minerales que manejaban con facilidad. Por eso, cuando se instauraron en otros países, donde la fecundidad era un requisito primordial; llevaron con ellos dioses de fertilidad, asegurando el éxito en esas regiones.
El uso de las joyas era una medida de protección, reflejando a las deidades en forma de animales en cada símbolo individual. Las prendas también mostraban prestigio y bienestar dentro de las castas socializadas de la cultura escandinava.
La plata y el oro eran llevados en las personas de gran influencia; el bronce y peltre fueron usados por quienes tenían menos prestigio. Las piezas se manejaban en el comercio vikingo con bastante frecuencia, mercadeando joyería con figuras de dragones, serpientes, halcones, jabalíes y otros dioses animales para procurar buena suerte.
El martillo de Thor, dios del trueno y el relámpago; fue uno de los proyectos más realizados, plasmándolo en colgantes, amuletos y reliquias. Igualmente, las joyas vikingas eran influenciadas con otras culturas antiguas como los celtas, las runas y modelos de nudos que destacaban con regularidad. En el canal YouTube Hella The Vinking, puede observar la preparación de una forja usada por los orfebres vikingos en la elaboración de las joyas.
Utilizaban monedas de un centavo, medio y cuarto de meniques; efectuando las transacciones comerciales de aquel período. Cortaban las piezas de plata en acuerdos monetarios de pago, conocida como prendas de moneda truco; mucha de esa joyería ha sido descubierta en depósitos de mercancías de esa antigüedad, acompañada por gran cantidad de monedas.
Fueron uno de los primeros, en utilizar el método de cera perdida para vaciar los metales y se valían de herramientas punzantes; creando forjas y moldes sencillos. Los Vikingos de Dinamarca empleaban piedras preciosas como el Ámbar para decorar las joyas.
La orfebrería vikinga, se identificaba sobre todo en joyas fabricadas en filigrana de plata y oro; insertando muchas veces monedas extranjeras, árabes y anglosajonas, las cuales adquirían con los canjes comerciales. Producían piezas únicas, reservadas a los jefes y guerreros; sin embargo hacían prendas en series, destinadas al uso común. Adornaban y embellecían objetos de uso cotidiano, moldeando elementos de gran impacto con figuras entrelazadas; asimismo creaban bajorrelieves usados en los escudos y timoneles de sus espectaculares naves.
La orfebrería vikinga, nos ha dejado una inspiración invaluable; la belleza de sus modelos es cautivante. Impactantes alhajas diseñadas por reconocidos joyeros y artesanos en todo el mundo, para complacer nuestros gustos y preferencias.
ALFA