El ocho de febrero de 2016, comienza a regir el año del mono de fuego; un lapso pronosticado como intenso, que termina el día 27 de enero de 2017. El mono tiene una personalidad ingeniosa, noble, independiente, inteligente y versátil con una agilidad mental sin fronteras; y posee una creatividad inclinada a la improvisación.
Es el noveno animal del zodíaco chino y las personas bajo el influjo de este signo, pertenecen a los años de nacimiento 1920, 1932, 1944, 1956, 1968, 1980, 1992, 2004, 2016 y 2028; en adelante con una diferencia de 12 años en cada ciclo. Son seres con un carácter colérico cuando van en contra de sus ideas más arraigadas, llenándose de rencor y manifestándolo a manera de superioridad desbordante.
El mono conquista la vida como una constante diversión y trata de impresionar en todo momento. A veces resulta cínico, tomando una actitud en la que la moral deja mucho que desear, aunque luego se arrepienta; se deja llevar en ocasiones por la soberbia a pesar de ser increíblemente bondadoso.
El año del mono es negativo para las personas nacidas bajo este signo, por ello toman muchos cuidados cuando llega ese momento y suelen resguardar sus inversiones monetarias; al igual se extreman protegiendo en gran medida la salud, las relaciones familiares y amorosas. En el canal “YouTube” “Sanarnos” puede, disfrutar de una descripción sobre el año del mono de fuego.
Mientras transcurre la influencia del mono, debemos integrar nuestras acciones; evitando en lo posible voltear la balanza, en la delgada línea de lo positivo y negativo. Lo que indudablemente ratifica una suerte guiada hacia los extremos, sin saber si son buenos o malos.
Este año estará influenciado por el mono del elemento fuego, el más enérgico de todos; con dotes naturales para el liderazgo, decidido, seguro y definido en sus conceptos. Sin embargo, se deja llevar demasiado por la imaginación; por ende debe sujetar su fantasía para lograr desenvolver y trasladar sus imágenes inspiradoras a la práctica real.
No obstante, el fuego le confiere una vitalidad y energía impresionante, consiguiendo el éxito deseado; también lo convierte en obstinado, desconfiado, celoso y testarudo. Por lo tanto, trasladando estas características de manera global, se puede deducir que el 2016 se replantea como un espacio de madurez y conciencia colectiva; al mismo tiempo está intervenido por el Planeta Marte, al vincularse con la violencia, manifestaciones de calle y atentados. Las cosas se podrán lograr en el ámbito personal y dentro de la sociedad, a través de grandes esfuerzos que serán coronados con el triunfo.
Tendrá que luchar fervientemente, por garantizar todos los proyectos que piense llevar a cabo en un año disponible para tomar riesgos contra todo pronóstico. Es el momento para entrar en acción, comenzando con nuevas tareas, concluyendo las cosas pendientes. No se detenga, no mire atrás, apodérese de la ayuda necesaria para salir hacia adelante. Manténgase en constante movimiento, es indudable que toda su voluntad será premiada con la tenacidad y el fruto de su constancia.
ALFA