La salud del ser humano generalmente se ve expuesta a una serie de factores del medio ambiente, que generan enfermedades diversas. Muchas de estas enfermedades se asocian a la presencia de hongos y bacterias, que causan desde erupciones en la piel hasta infecciones graves que ponen en riesgo la vida de muchas personas.
El presente artículo tiene como objetivo explicar los aspectos más importantes acerca de los hongos, esos organismos unicelulares o pluricelulares con estructura de talo, sin sensibilidad ni movimiento, que se comportan como heterótrofos, pero que no forman tejidos auténticos.
La mayoría de estos microorganismos viven sobre organismos muertos, es decir, son saprófitos, se reproducen sexual o asexualmente por medio de esporas, y muchos de ellos son parásitos que causan enfermedades y otros son simbióticos. Aunque para el hombre son amenazas que afectan su salud, estos organismos cumplen una función fundamenta en el ciclo vital, debido a que actúan como descomponedores de la materia, además de que algunos son productores de antibióticos o alimentos.
Por otra parte, la gran mayoría de los hongos son terrestres como los mohos, setas, levaduras, mildius, royas blancas, entre otros, pero algunos viven en el agua, llamados hongos de agua dulce, siendo parásitos o saprófitos de peces o plantas. Se caracterizan por poseer paredes celulósicas y micelios ramificados los cuales carecen de tabiques transversales.
En cuanto a las infecciones provocadas por hongos, las mismas son también son conocidas como candidiasis, cuando el hongo que las provoca es una levadura de la especie Candida, que crece en el contacto de mucosa con la piel.
Es así como, uno de los usos más conocidos de los hongos es su actuación en la elaboración de la cerveza y el pan, donde actúan por medio de la fermentación que produce la levadura, la cual es un hongo unicelular, y que es básica en el proceso de fabricación de estos productos. Cabe señalar que los más comunes son aquellos que viven en el suelo, pero muchos de ellos viven en las hojas de algunas plantas, en los árboles, habitando generalmente en los materiales que se encuentran en estado de descomposición.
Los hongos parásitos representan una amenaza latente para la salud de las personas, ya que éstos tienen efectos tóxicos que atacan el organismo provocando generalmente infecciones. Asimismo, los hongos que causan efectos dermatológicos, se les conoce como dermatofitos, y dañan de manera directa y rápida el tejido de la piel, provocando infecciones, que pueden llegar a ser contagiosas.
Otro de los daños que pueden causar los hongos parásitos, es el provocado a diferentes cultivos a través de las plagas que generan, lo cual ha sido relacionado con el uso excesivo de químicos, motivo por el cual se han modificado algunos de los métodos y procedimientos de la agricultura.
Es importante aclarar que las infecciones provocadas por los hongos no son hereditarias, pero sí contagiosas, por lo cual se deben tener precauciones, por lo que la prevención de las mismas se promueve a través de la adquisición y mantenimiento de buenos hábitos de higiene, así como el fortalecimiento del sistema inmunológico, con la finalidad de mantenerlo resistente y evitar la llegada de los enemigos de la piel. Sin embargo, si ya la infección ha comenzado, existen tratamientos muy efectivos y diversos, que van desde los típicos remedios caseros con frutas y minerales hasta distintas pomadas dermatológicas.
Con respecto a las partes del cuerpo que generalmente atacan los hongos provocando infecciones, se debe señalar que una de las más comunes es la que se desarrolla en los pies, pero también pueden presentarse en las manos o en los genitales.
Los hongos que atacan los pies, generalmente pueden extenderse desde los dedos a la planta o a las uñas, provocando el origen de grietas y/o ampollas, además de comezón, ardor, e irritación, afectaciones que pueden estar acompañadas de dolor en algunos casos. Por regla general provocan un olor desagradable.
Por ende, hay que tener cuidado con los hongos, imagínense que tengan una reunión importante y tenían previsto colocarse esas sandalias nuevas que dejan los dedos expuestos y que te compraste para la ocasión, y sorpresa, te llegan esos enemigos desagradables a tus pies, obviamente debes cambiar de planes y lucir unos zapatos cerrados, por ello la prevención es la mejor opción ante los hongos.
Sin embargo, existen muchos remedios caseros que los atacan y los eliminan de manera efectiva, tales como el vinagre blanco, el bicarbonato de sodio, la piña, el limón y los baños de sal, los cuales regulan la irritación, el pH y el grado de sequedad de la piel. Otra alternativa efectiva para eliminar los hongos son las pomadas o cremas antimicóticas, las cuales actúan directamente en la zona afectada de manera rápida y efectiva.
Cuando los hongos atacan las uñas de pies y manos, provocan infección fúngica conocida como “onicomicosis”, que se inicia generalmente en los dedos, extendiéndose rápidamente por toda la zona. Los hongos de las uñas son muy contagiosos, por lo que se recomienda tener precaución cuando se comparten duchas y artículos personales como corta uñas.
Esta infección fúngica es la de mayor incidencia en todo el mundo, debido al ambiente en el cual se desarrolla, afectando aproximadamente del 3% al 4% de la población, siendo los hombres los más propensos a adquirir esta enfermedad que puede controlarse con métodos caseros o pomadas.
Este tipo de afectación llamada micosis, es mucho más común en las uñas de los pies, debido al uso del calzado, los calcetines y/o la exposición de las extremidades en lugares húmedos y cálidos, lo cual propicia su desarrollo y proliferación. Sin embargo, se debe tener mucho cuidado con los hongos, porque independientemente de la parte del cuerpo que ataquen, resultan muy molestos y la apariencia que toman las uñas es antiestética, debido al debilitamiento de las uñas, el color amarillento que toman, además de que la piel alrededor se enrojece y se agrieta.
Los hongos también pueden crecer en las manos. Uno de los factores que los desencadena es morderse las uñas, usar uñas artificiales, tener una sudoración excesiva o mantener las manos en agua durante mucho tiempo.
Asimismo, también pueden aparecer en la boca, aunque no son muy comunes. Su aparición en una zona tan delicada como la boca produce malestares muy desagradables como, sangrado al cepillarse los dientes, inflamación de encías con dolor, picor y grietas en la comisura de la boca, dolor al hablar y comer, así como mucha irritación.
Esta aparición se relaciona con un nivel alto de azúcar en la sangre, con niveles de desnutrición, con un sistema inmunológico débil, y con el consumo constante de tabaco o de alcohol. Además, estos hongos atacan comúnmente a los niños muy pequeños que aun no tienen desarrollada la flora bucal.
Una de las enfermedades muy frecuente producidas por los hongos y que afecta directamente a las mujeres, es la candidiasis vaginal, estimándose que todas las mujeres la padecerán por lo menos una vez en la vida. Esta enfermedad es causada por regla general por el uso de ropa interior muy ajustada, la cual como es lógico se humedece debido al calor, así como el uso de esteroides, antibióticos y/o anticonceptivos, debido a que estos medicamentos podrían eliminar las bacterias naturales, las cuales frenan el crecimiento de la levadura que es la que provoca esta afectación.
Los síntomas que se presentan son irritación constante, dolor al orinar, ardor y enrojecimiento en la vulva, así como la aparición de una secreción espesa de color blanco que, aunque no presenta un olor desagradable, genera un picor bastante molesto.
Para atacar esta enfermedad, generalmente se siguen tratamientos a base de supositorios o cremas vaginales, así como el uso de ropa interior de algodón, no usar trajes mojados o húmedos durante un período prolongado de tiempo y evitar las duchas vaginales. Sin embargo, cuando las infecciones son muy fuertes, se hace necesaria una consulta con un especialista, con la finalidad de que realice un examen a través de una muestra de la secreción blanquecina, para posteriormente elegir el tratamiento más indicado para el caso.
Algunas de las alternativas naturales o remedios antihongos, que pueden ayudar a atacar y eliminar a los hongos, incluyen al vinagre de manzana, el cual tiene propiedades alcalinas que regulan el pH de la piel, alterando las condiciones que necesitan los hongos para propagarse, por lo cual es conveniente sumergir la zona afectada durante 15 o 20 minutos, en una mezcla de esta sustancia con suficiente agua.
Otra opción es el ajo, el cual es un antibiótico natural con acción antimicrobiana que favorece la eliminación de gérmenes y hongos para evitar infecciones. Se puede usar en forma de pasta elaborada con 10 dientes de ajo machacados mezclada con agua tibia.
El yogur natural también es muy utilizado en el tratamiento de hongos. Este probiótico tiene una acción muy eficaz en el tratamiento de las infecciones, al aplicarlo directamente sobre las zonas afectadas. Asimismo, unas gotas de aceite de árbol de té aplicadas sobre la zona infectada producen una acción antiséptica sobre la misma y elimina los microorganismos.
Por su parte, una pasta de bicarbonato de sodio con zumo de limón combate los hongos y microorganismos que afectan la salud de las uñas. También puede usarse solo el polvo del bicarbonato en los zapatos o en el área afectada, así como también el zumo de limón aplicado directamente.
Finalmente, es recomendable evitar la proliferación de los hongos manteniendo una higiene adecuada, lavarse los pies dos veces al día y secarse bien los pies y manos, usar zapatos y medias que faciliten la ventilación del pie, evitar las medias sintéticas y de nailon y en la medida de lo posible usar jabón líquido antibacterial.
ALFA