Aunque puede ser un lugar ideal para guardar muchas cosas, existen algunas que no debemos guardar en el baño. Ya que la humedad y las temperaturas fluctuantes que generalmente tiene un baño normal podrían hacer más daño que bien a lo que allí almacenamos. Sin embargo, ya sea por comodidad o como parte de una costumbre adquirida muchos de nosotros dejamos en el baño algunos artículos imprescindibles.

Es así como, entre ellos figuran principalmente los de cuidado personal y belleza. Pero, atención a lo siguiente, si bien algunos de estos productos fueron hechos para usarlos en el baño eso no significa que se deban guardar en el baño. Descubra a continuación, cuáles son esas cosas que usted está guardando allí en el baño y que no debería.


Medicamentos y vitaminas

Estos sin duda constituyen una de las principales cosas que solemos guardar en el baño y que no debemos. La razón es simple y sencilla, los medicamentos se conservan mejor en lugares limpios, frescos y secos, respetando las condiciones que establecen en el envase. Por lo que, si se mantienen en espacios llenos de humedad como el baño, es probable que pierdan su efectividad y produzcan efectos no deseados.

Como lo habíamos mencionado al principio también es posible que se dañen, incluso mucho antes de lo previsto como fecha de vencimiento. El mejor lugar para guardarlos es en un cajón en su habitación. No solo evitará que se dañen sino también podrá mantenerlos fuera del alcance de los pequeños de la casa.

Toallas

Sabemos que las toallas son un elemento imprescindible en nuestra rutina de baño y, por lo tanto, las queremos tener a mano en todo momento. Pero por nada del mundo se deben guardar en el baño, ya que al hacerlo las estamos poniendo en contacto con hongos, bacterias y el moho que vive allí. Los cuales se alojarán en la toalla y posteriormente trasferiremos a nuestra piel al usarlas. Además, se podrán húmedas y adoptarán un mal olor.

Lo más recomendable es tomar una toalla y llevarla al baño cuando vayamos a bañarnos y luego sacarla después de su uso y tenderla. Procurando siempre, que sea en un lugar donde se pueda ventilar hasta que se seque bien. En el caso de las toallas extras también debe optar por guardarlas en un armario fuera del baño. Así mismo, se considera ideal lavar las toallas después de 3 usos y dejar que estas se sequen completamente antes de usarlas nuevamente.

Batas de baño

Al igual que las toallas de baño, estas también pueden albergar todo tipo de gérmenes y bacterias producto de la humedad, además de mal olor. Así que debemos darle el mismo trato a la hora de lavarlas, secarlas y guardarlas antes de su siguiente uso.

Libros

A muchos de nosotros nos encanta leer un buen libro o revista mientras usamos el baño. Sin embargo, hay que ser honestos en algo, nuestro material de lectura tampoco escapará a la acción implacable de la humedad. De hecho, al guardar en el baño los libros y revistas estos absorberán la humedad presente y es posible que también sean salpicados de agua. Esto los dejará con algunas páginas arrugadas y parte de la encuadernación deteriorada.

Aquí la recomendación es obvia: si desea usarlos especialmente en este lugar, al terminar manténgalos en un estante fuera del baño.

Joyas

Uno de los principales enemigos de nuestras joyas es la humedad. Ya que, puede acelerar el proceso natural de oxidación de algunos metales y además provocar que algunas joyas se empañen rápidamente y pierdan su brillo. A menos que se trate por supuesto, de oro puro, algo que resulta difícil que ocurra si consideramos que incluso el oro no se usa en la joyería en su estado más puro.

Actualmente los principales tipos de metales preciosos empleados por los joyeros son una mezcla de varios metales que aportan dureza y otras propiedades. Por lo que, la mayoría de nuestras joyas reaccionaran más rápido a la humedad. Ahora tal vez entienda porque no se deben guardar en el baño si no las estamos usando y porque es mejor guardarlas en un joyero o en una bolsa hermética en su dormitorio

Cepillo de dientes

Este es uno de los principales errores que cometemos con nuestro cepillo de dientes, pues, a muchos nos han ensañado que el cepillo dental va en el baño. Pero lo cierto, es que se trata del peor lugar para guardarlo, precisamente porque es el hogar de microrganismos que se pueden transferir al cepillo durante su uso y mientras permanece allí. Pasándose de esta forma a nuestra boca, dientes, encías y lengua.

De hecho, varios estudios, entre ellos uno realizado en 2012 por la Universidad de Manchester en Inglaterra han descubierto que nuestro cepillo puede contener incluso más de 10 millones de bacterias. Y una buena parte ellas provienen de la materia fecal que se encuentra flotando por todo el baño y que es rociada cuando bajamos el inodoro.

Estas bacterias pueden ser causantes de varias enfermedades intestinales y estomacales. Sin duda, son razones de peso para no guardar en el baño nuestro cepillo, pero si en un sitio ventilado y fresco como nuestra habitación.

Maquillaje

Aun cuando usted se maquille en el baño, sus preciados productos de maquillaje no deben permanecer allí. Porque al igual que sucede con el cepillo de dientes, los cambios de temperatura y humedad propagarán en ellos moho y bacterias. Pero también provocará que cambien de textura, reduzcan su efectividad a la hora de aplicarlos y se dañen más rápidamente. Para este tipo de productos lo mejor es mantenerlos en un lugar como nuestro dormitorio, donde la temperatura se mantiene más estable.

Perfumes

Exhibir sus perfumes favoritos en el baño puede ser algo muy habitual para muchas personas. No obstante, lo que no se tiene en cuenta tal vez por ignorancia, es que se trata de un producto delicado cuyos mayores enemigos son la luz y la humedad.

En tal sentido, los expertos advierten que, a causa de los cambios de temperatura y humedad del baño, sus aceites, fragancias y alcoholes pueden dañarse y oxidarse. Destruyendo con ello la integridad molecular de su fragancia y reduciendo su vida útil. Si quiere evitarlo, debe guardarlos en sitios alejado de la humedad y de la luz.

Esmalte de uñas

La mayoría de los esmaltes de uñas duran alrededor de dos años, pero dejar esos frascos en el baño puede hacer que se echen a perder mucho más rápido. Una vez más, el calor y la humedad son los culpables. Si nota que su esmalte de uñas no se difumina, es demasiado espeso o se desmorona tírelo.

Hojas de afeitar

Está bien mantener su rasuradora actual en la ducha, pero las hojas de afeitar adicionales deben dejarse fuera del baño. De lo contrario, la humedad puede oxidarlas u opacarlas incluso antes de comenzar a usarlas. Secar las maquinillas de afeitar después de cada afeitado puede ayudar a mantenerlas más efectivas por más tiempo.

Electrónica no impermeable

A muchos nos encanta cantar en la ducha y actualmente algunos de nosotros nos gusta usar nuestro smartphone para hacerlo. Pero lo que parecemos ignorar es que la humedad puede dañar seriamente nuestro teléfono. Así que en caso de que necesite escuchar o corear sus canciones favoritas o las noticias matutinas mientras se ducha, lo mejor es invertir en una radio de ducha (sí es que todavía existen) o un altavoz impermeable.

ALFA