El vegetarianismo es más que un tipo de alimentación, basado en el consumo integral de vegetales y frutas, obviando el uso de cualquier producto venidero de animales. Calificada como un estilo de vida, el vegetarianismo ostenta el respeto por la vida de otras especies, con valores ecologistas, y con una gran consideración sobre la madre naturaleza.
Desde el año 1847, se conoce la palabra vegetariano y vegetarianismo, tras la fundación de la ‘Vegetarian Society’ en la ciudad de Mánchester. Sin embargo, se tienen registros desde mucho antes sobre las primeras prácticas del vegetarianismo, siendo un estilo promovido desde la Antigua Grecia, por filósofos y practicantes religiosos.
Tiempo después, los siguientes seguidores de este estilo de vida se hallan en el siglo XIX, permitiendo la aparición de la primera sociedad vegetariana en el Reino Unido, siguiendo hacia otras naciones en muy poco tiempo, como fueron Alemania, y Holanda, consiguiendo luego, la conformación de la Unión Vegetariana Internacional para el año 1906.
El vegetarianismo es una práctica dividida en varios tipos y grados de aplicación, que se identifican de acuerdo a los alimentos regentes de su nutrición. Existen los vegetarianos estrictos, los lacto vegetarianos, los ovo vegetarianos, los ovo lacto vegetarianos, veganos, y quienes se aplican hacia el frugivorismo.
El vegetariano estricto es aquel que se abstiene por completo de consumir cualquier tipo de alimento proveniente de animales. Un vegetariano estricto no debe confundirse con un vegano, pues este primero solo mantiene un régimen vegetariano en cuanto a su elección nutricional.
Los lactovegetarianos son un segundo grado de creyentes en esta forma de vida, que se distinguen del resto debido a que su dieta se basa en productos derivados de la leche, además de incluir cereales, legumbre y frutas. Practicada por budistas, hinduistas, y jainistas, el lacto vegetarianismo es base en diferentes tradiciones religiosas.
Por su parte, los ovo vegetarianos, a diferencia de los vegetarianos estrictos, permiten el consumo de vegetales y frutas junto al consumo de huevos. Si bien existen críticas conforme a las condiciones en que se mantienen a los animales productores, este estilo de dieta permite equilibrar la abstinencia proteínica. Conforme al ovo lacto vegetarianismo, ésta representa una combinación de los últimos estilos implementados.
Sobre los veganos, al igual que los vegetarianos estrictos, se abstienen por completo de consumir cualquier producto de origen animal, sea carne, leche, o huevo. Sin embargo, existe una clara diferencia entre estos dos grupos. Si bien los vegetarianos estrictos aplican el respeto a los animales en su alimentación, los veganos amplían esta creencia hacia el uso de materiales y productos derivados de la explotación animal.
Por último lugar, el estilo de frugivorismo se limita al uso condicional de las frutas como base estricta de la alimentación. Los frutoarianos creen en que en las frutas yace el germen de la vida, y que a diferencia del resto de los vegetarianos, en su modo de vida no se aniquilan plantas para que el hombre pueda alimentarse.
ALFA