Las personas tenemos algunos hábitos alimenticios que son dañinos; pensamos que si los alimentos no están fritos o bañados en diversos tipos de salsas, no serán gratos al paladar. Sucede que el ritmo de vida actual nos impulsa a querer hacer muchas cosas en poco tiempo, y una de esas es satisfacer las ganas de comer. Observamos que preparar un plato casero lleva mucho tiempo, y es allí donde recurrimos a saciar ese apetito con comidas fritas, sazonadas químicamente y de forma rápida, dándole prioridad a la mal llamada “comida rápida”, privándonos de apreciar la gran variedad de alimentos cómodos para el consumo, agradables al gusto y sanos para el organismo que tenemos a nuestro alcance.
Estos alimentos, además de ser un deleite al paladar, traerán beneficios al cuerpo. Al ser ricos y saludables, facilitarán el proceso de transición hacia los buenos hábitos alimenticios. Además, para que este cambio no se torne aburrido, nos podemos rodear de amistades que deseen ser parte de esta saludable aventura.
¡Comer delicioso y light es posible!, solo debemos permitirnos hacer ciertas modificaciones; primero en la mente, y luego en el menú habitual. Por ejemplo, en lugar de cenar hamburguesas, pique algunas frutas y acompáñelas con jugos naturales; ésta es una opción rápida y sabrosa. Estos hábitos no se adquieren de la noche a la mañana, pero si se le brinda a esta sabrosa manera de comer una oportunidad para ser parte del día a día, poco a poco nos acostumbraremos a ella sin arrepentirnos.
No dejemos que el ajetreo de la vida diaria haga estragos en nuestro cuerpo; tener un organismo sano es sinónimo de un alma limpia. ¡Se puede hacer un espacio en la agenda para una buena alimentación! Si convertimos esto en una meta, y logramos el objetivo, observaremos con agrado las mejoras, pues aunque hayan días cargados de trabajo, no nos desbordará el estrés; al contrario, nos sentiremos felices, con orgullo y con complacencia, gracias a los nuevos platillos de comida ligera que ahora consumimos.
Usted puede realizar una lista de los alimentos ligeros que más llamen su atención, como frutas, ensaladas, incluso helados de yogurt y mermeladas bajas en azúcares. Recuerde que lo importante es comer suave, pero con sabor… ¡Todo es posible, si se lo propone!
Sin embargo, es cierto que a veces necesitamos algo más de motivación para empezar y alcanzar la meta. Podemos convidar a alguien cercano a que nos acompañe a variar los alimentos de nuestra dieta, a comer algo más saludable para el organismo, e incluso proponerse retos en los cuales deba aumentar el consumo de productos ligeros cada cierto tiempo. Dependiendo de cómo apliquemos estos nuevos hábitos, observaremos los beneficios a mediano y largo plazo, pero con seguridad.
No hay que cerrar las puertas a lo saludable, si nos adentramos en este sano mundo, nos sorprenderemos de los maravillosos sabores que en los alimentos naturales se consiguen, y de los grandes beneficios que su ingesta nos aportarán. Esta nueva disciplina alimenticia brinda la oportunidad de apreciar, sin limitaciones, todos los colores y sabores de la vida.
La actividad física con una buena alimentación son las bases para un organismo sano. Caminar media hora en la mañana, te llenará de buenas vibras.
Es cierto que de vez en cuando necesitamos motivación extra; yo hice un cambio en mi vida, deje la comida chatarra y he mejorado mi forma de vivir, pero nunca lo hubiera logrado si mi esposo no me hubiese apoyado.
Es bueno darle una oportunidad a los alimentos sanos, para que estos también nos deleiten con sus ricos sabores. Yo prefiero comprar una ensalada en lugar de llenar mi cuerpo de frituras.
Excelente observación; yo practico yoga y me alimento lo más natural posible, todo esto se ha convertido en mi forma de vida, la cual está siempre activa pero relajada y llena de energía.
Hola, me sentí muy identificada con este artículo; en lo personal, mi estilo de vida es muy activo, y siento que picar frutas me llevará mucho tiempo. Pero la verdad es que nada me cuesta comprar un jugo natural, en lugar de un perro caliente.