Para muchas personas, el camino hacia el bienestar está establecido en alcanzar la felicidad o quizás es el concepto escuchado desde siempre; pero, para la mayoría, esa noción es una teoría lejana. El bienestar o calidad de vida es una idea más asequible, centrada en las emociones positivas y no significa la ausencia de males ni sufrimientos, según afirma Martin Seligman, reconocido psicólogo estadounidense, autor de la “Teoría del Bienestar o Modelo PERMA”; a través de esa propuesta, pasó de estudiar la felicidad (1999), a investigar el bienestar (2010).
Algo muy parecido desarrolló la psicóloga Carol Ryff, profesora de la Universidad Estatal de Pennsylvania. Ella realizó un modelo sobre el bienestar psicológico, precursor de esquemas de la psicología positiva, constituido por seis elementos.
Auto-aceptación: el mejor modo de acabar con algo negativo, es cultivando lo opuesto; las auto-críticas no deben quitarnos el sueño. Más bien, aceptémonos tal como somos, siendo amables con nosotros mismos, centrándonos en aquello que hacemos bien, en vez de reprocharnos por lo que hacemos mal.
Convivencias positivas: se fundamentan, más que todo, en cultivar relaciones de calidad con las demás personas, valorándolas de la mejor manera. Estableciendo comunicaciones llenas de empatía, esperando dar y recibir, manteniendo vínculos importantes.
Proyecto de vida: consiste en luchar por metas que tengan sentido para su vida; de no ser así, cuando logre alcanzarlas, no la motivarán en absoluto, dejando un enorme vacío en su existencia. El resultado de esas metas es encontrar la satisfacción de lo que esperaba; lo ideal es establecer objetivos de acuerdo a sus propios valores y deseos, no planeándolos basándose en el temor.
Autonomía: es una capacidad que usted puede desarrollar tomando sus propias decisiones, sin importar que, muchas veces, vaya en contra de la opinión ajena, manteniendo ideas firmes, contribuyendo de ese modo a su desarrollo evolutivo e integral. Esto le va a permitir ser una persona independiente, sabiendo controlar, afrontar y tomar, por propia iniciativa, el desafío de vivir de acuerdo con las normas y predilecciones que más le complazca.
Control del entorno: como persona, tiene muchas realidades en el mismo espacio y tiempo, pero, la mejor elección en ese momento es su propio yo. Saber manejar el entorno requiere de mucha flexibilidad, acondicionándose a interactuar con el medio; por lo tanto, es un punto vital que forma una constante transformación a la cual es necesario adaptarse, siendo capaz de amoldarlo a sus necesidades.
Crecimiento personal: al aumentar sus conocimientos, desarrolla su potencial en todos los aspectos. Saber aprovechar sus habilidades le permitirá desenvolverse emocionalmente, abriéndose a nuevas experiencias, teniendo la firme convicción que ha ido mejorando, aumentando su madurez.
El camino hacia el bienestar está a la vuelta de la esquina, solo debe vencer el miedo, aplicando su inteligencia. El mejor sentido que puede darle a su vida es atreverse a luchar por tener un presente lleno de vivencias, que sepa afrontar con una actitud positiva. En el canal “YouTube” “Teresa Egaña”, esta psicoterapeuta nos da su punto de vista acerca del bienestar.
Todos los días trabajo en lograr mi bienestar, y esta publicación me ha ayudado muchísimo el día de hoy
Bienestar es la salud física y emocional