La Tierra es como esa madre que da cobijo a hijos que conforman conjuntos de seres vivos de diversas especies, en ella, se desarrollan, crecen y mueren, unos en períodos de tiempo más cortos y otros llegan a permanecer por millones de años. Nosotros, los seres humanos, somos una especie más dentro de ese conjunto, mientras que las plantas, los animales, los minerales, el aire, el agua, hasta los microorganismos, son nuestros hermanos, con los cuales tenemos que convivir en el planeta.

Sin embargo, generalmente pensamos que los seres vivos, además del ser humano, son las plantas y los animales, no incluimos en la lista a los minerales, porque son vistos como simples piedras que no muestran movimientos, pero ellos poseen su propia energía, es más, nos la pueden transmitir a nosotros para beneficiarnos.

Entre esos minerales fantásticos que nos pueden aportar grandes cosas, están los cuarzos, los cuales son muy abundantes, al punto de considerarse como los más comunes sobre la corteza terrestre, después de los feldespatos. De allí que, es importante describirlos desde el punto de vista físico y químico,  comenzando por su composición básica de este mineral, cuyo principal elemento es el sílice, presenta un color blanco transparente, sin embargo,  también se encuentran cuarzos con vetas rosas, rojizas y hasta negras, dependiendo del grado de impurezas presentes en su composición.

Además,  su densidad es de 2,65 g/cm3, tiene punto de fusión de 1713°C y  una dureza de 7 en la escala de Mohs, pudiéndose encontrar  en las rocas metamórficas, ígneas, y sedimentarias. Presentan dos estructuras básicas según su variedad, por ejemplo, el cuarzo-α (alfa) o cuarzo bajo, posee una estructura  trigonal y puede existir en temperaturas de hasta 573°C, mientras que el cuarzo-β (beta) tiene estructura   hexagonal y así se mantiene hasta los 867°C.

Desde el punto de vista físico, el cuarzo posee propiedades piro y piezoeléctricas, que le dan la capacidad de presentan polaridad, que  lo han convertido en pieza fundamental en el proceso de fabricación de instrumentos electrónicos de precisión, como por ejemplo los “relojes de cuarzo”, así como en la elaboración del vidrio y de placas utilizadas en la radiotécnica.

Es así como, la presencia ancestral de los cuarzos en las diversas culturas alrededor del mundo, usados como amuletos y/o joyas para atraer las buenas energías, se complementa con el uso tecnológico que se le ha dado en la era moderna, encontrándose en objetos de uso masivo como los computadores,  celulares, en los  microchips, en los relojes de cuarzo, en la utilización de rubíes para los láser o en la refrigeración con fluorita.

Dadas las características físicas que nos hablan de grados de impurezas que originan vetas de colores, tenemos que señalar que actualmente se conocen diferentes tipos de cuarzos que poseen sus  propiedades energéticas específicas de acuerdo a la variedad. Los principales son el cuarzo cristal,  el cuarzo rosa y el cuarzo ahumado, pero también se consideran tipos de cuarzo al ágata, el ámbar, el citrino, las coralinas, amatista, aguamarinas, lapislázuli, entre otras, y de cada una de ellas hablaremos más adelante.

Esas propiedades energéticas son posibles, debido a que os cristales poseen la capacidad de recibir, almacenar y liberar energías, no en vano los chinos y las culturas hindúes por miles de años lo han usado por motivos religiosos y de salud, así como para equilibrar el espíritu de las personas y alejarlas del mal, llegando  a llamar  al cuarzo «piedra viva»,  porque  logran sentir sus movimientos energéticos o vibraciones al contacto con  las manos, generándose una interacción   vibratoria  en un proceso de intercambio de  energía entre el cuarzo y la persona.

De esta manera, el cuarzo absorbe la energía del cosmos, la almacena y la amplifica, lo cual es fundamental para el proceso de canalización de  la energía universal, que se manifiesta a través de los seres vivos, los cuales pasamos a ser transmisores y receptores de la misma. Por eso, es importante acotar que  cada tipo de cuarzo, posee  propiedades específicas  que se atribuyen a ciertos beneficios a los cuales podemos acceder, aunque no necesariamente  tienen los mismos efectos en todas las personas, por lo que cada quien debe usar su intuición y concentrarse al hacer contacto con ellas.

Por otra parte, las atribuciones o propiedades que se le atribuyen  a las piedras son generales   y muy relativas, debido a que su nivel de  energía no se puede medir, sin embargo, muchas evidencias han demostrado que se han conseguido resultados satisfactorios en el tratamiento de situaciones de salud, estrés y manejo de conflictos de todo tipo.

Para explicar mejor este punto, vamos a conocer a continuación algunas propiedades y usos mayormente reconocidos  a los diferentes tipos  de cuarzos, comenzando por los principales:

Cuarzo cristal o cristal de roca: este cuarzo se considera como un  receptor y transmisor de energía, a través del cual se puede  amplificar las  vibraciones a todos los niveles, por lo cual se dice que su uso es óptimo para lograr la concentración y la visualización mental, por ello  son generalmente aplicados  en  la prevención y tratamiento  de algunas enfermedades, actuando en el alivio de  dolores en diferentes partes del cuerpo, en la regeneración de tejidos, o como apaciguador de  desórdenes nerviosos, además de ser muy beneficioso y efectivo en el proceso de armonización emocional y espiritual.

Por otra parte, al cuarzo cristal se le atribuye la capacidad de  mejorar la calidad del cerebro, a través del intercambio energético  que se produce entre nuestro cuerpo y la piedra, lo cual favorece nuestra mente, para lograr más  serenidad y tranquilidad, además de potenciar nuestra capacidad de auto-sanación a nivel energético, debido a que al alcanzar sutilmente nuestro campo magnético o aura, lo limpia de impurezas y ondas negativas.

Cuarzo rosa: este cuarzo es un mineral sumamente energético el cual presenta  varias tonalidades que van desde  el  rosado transparente hasta un rosa muy intenso, pero todos poseen muchas propiedades, aunque las más reconocida es su capacidad de transmitir vibraciones positivas y su poder sanador en situaciones relaciones con el amor, al punto de ser utilizado antiguamente  en los niños que carecían de amor para equilibrar sus centros energéticos.

Asimismo, se utiliza para lograr el equilibrio emocional, ya que favorece la convivencia y la reconciliación, relaja y aporta armonía en situaciones difíciles, además de usarse para equilibrar el ritmo cardiaco, reducir el estrés, controlar la tensión nerviosa, eliminar el insomnio y alejar las pesadillas.

Este tipo de cuarzo tiene un significado espiritual profundo, debido a los beneficios que se han nombrado anteriormente, y a que actúa específicamente en el chakra o vórtice energético del corazón, aumentando la sensibilidad, calidez, armonía, sensatez, compasión,  y otros valores espirituales importantes para lograr la salud emocional,  por lo que es ampliamente utilizado en la gemoterapia o uso de los minerales para la sanación.

Para lograr los beneficios antes mencionados, debemos colocar durante 10 minutos una o más piedras en el chakra del corazón, manteniéndose relajados, con una debida respiración y alejando de nuestras mentes cualquier pensamiento negativo, para así atraer las energías positivas de esta maravillosa piedra.

Cuarzo ahumado: Este tipo de cuarzo, del cual se  dice que es el más antiguo del mundo y está lleno de sabiduría, representa el nivel espiritual y simboliza la luz divina en el plano material, actuando como un vehículo a través del cual la energía universal entre en nuestras vidas,  por ello es llamado “el cuarzo de los magos”, debido a que a través de su uso se puede llegar a disolver la negatividad, para de esta manera podernos conectar con la conciencia divina que rige todos los planos y niveles de la vida terrenal, asociándose también  con el plano psíquico.

Finalmente, debemos destacar que aunque la mayoría de las personas ve a las siguientes piedras por separado, se considera que también son cuarzos con grados de impurezas mayores que les otorgan los colores característicos que poseen, por lo que a continuación vamos a describir sus beneficios:

Ágata: Es un cuarzo de altas vibraciones con colores diversos que absorbe las energías negativas, aportando seguridad y  firmeza, contribuyendo de manera efectiva  al equilibrio emocional y físico, por lo que generalmente  se ha atribuido su uso para el entrenamiento de los deportistas.

Ámbar: aunque se dice que no  una piedra como tal,  se ha considerado que es un tipo de cuarzo con un grado de impureza mayor, lo cual  no le quita su capacidad de proteger la salud, apaciguar los estados de ánimos, nervios y estrés, así como mejorar la memoria.

Amatista: Esta maravillosa piedra es conocida como el cuarzo púrpura, y su mayor beneficio está relacionado con la apertura a nivel espiritual, lo cual contribuye al desarrollo de cualidades como  la valentía, la creatividad, la autoestima, el equilibrio emocional, a través de la purificación de las energías y del recogimiento espiritual, en un encuentro consigo mismo y la luz divina.

Aguamarina: este cuarzo de color azul verdoso pálido, se le atribuyen propiedades relajantes que te ayudan a aclarar tus pensamientos, lo cual es fundamental para la toma de decisiones en tu vida. Además favorece las conexiones espirituales a través de procesos de respiración y meditación.

Citrino: este cuarzo de color amarillo, posee la energía necesaria para ayudarte a desbloquear las energías positivas que se te presentan a nivel espiritual y en plano físico, contribuyendo al equilibrio emocional y en el reforzamiento de la confianza en sí mismo, para así poder superar los obstáculos y no te quedes estancado.

Lapislázuli: es el cuarzo de color azul ultramar, el cual favorece el reforzamiento  de la mente y los pensamientos, lo cual nos provee de fortaleza y amplitud mental para percibir la vida desde un ángulo más claro, dejando a un lado  la  confusión y/o la incertidumbre, que bloquea el plano físico de nuestras vidas.

Por todos los motivos y beneficios descritos,  los cuarzos de cualquier color  son piedras maravillosas que se deben utilizar en los procesos de relajación y meditación, que nos ayudan a resolver problemas y a alcanzar el  equilibrio energético, como paso fundamental para trascender a nivel espiritual.

En definitiva, es recomendable llevar estas piedras energéticas en nuestros cuerpos, bien sea en forma de anillos, pulseras, collares, zarcillos, para lograr  la potenciación máxima los beneficios de los cuarzos en nuestras vidas, a través del intercambio de energía con ellos.

ALFA