La Vitamina D es un grupo de prohormonas solubles en grasa, las cuales son sustancias que generalmente tienen poca actividad hormonal por sí mismas pero que se convierte en hormonas. Esta es importante para la formación correcta de nuestros huesos. Según expertos las mujeres con niveles estables de vitamina D son 30% más delgadas que aquellas que padecen de déficit de esta vitamina.
En la contracción muscular es necesario que las mujeres postmenopáusicas tomen en cuenta esta vitamina, que previene la osteoporosis e influye en el fortalecimiento del sistema inmunológico; regula el estrés y la depresión, y se cree que actúa en la prevención del cáncer, la diabetes y enfermedades cardiovasculares, aunque esto aún se encuentra en fase de estudio.
Si quieres beneficiarte de un sinfín de ventajas, toma el sol 15 minutos al día, 3 veces a la semana, sin el uso de protectores solares; esto proporcionara la vitamina al organismo de forma natural. Sin embargo, el Instituto de Medicina de las Academias Nacionales en Estados Unidos advierte que no se debe aumentar la exposición al sol mayor a lo recomendado, por los riesgos de cáncer de piel.
Para las personas de pieles oscuras o de países donde escasea la luz solar, las horas y cantidad de exposición al sol influirán en las concentraciones sanguíneas de esta vitamina; por lo tanto, es necesario conocer que la vitamina D también puede ingerirse a través de alimentos como la leche, pescados azules (como la sardina, el atún o el salmón), huevos, o a través de alimentos fortificados con vitamina D, como los jugos y los cereales del desayuno. En otros casos también se puede recurrir a los complementos dietéticos.
El Instituto de Medicina (IOM) de las Academias Nacionales ha formulado los siguientes consumos diarios recomendados de vitamina D, asumiendo que hay una exposición mínima al sol.
Cantidad dietética permitida para personas:
- De 0 a 1 año = 10 microgramos diarios
- De 1 a 70 años de edad y mujeres embarazadas o amamantando = 15 microgramos al día.
- De 71 años o más = 20 microgramos diarios.
Como máximo, adultos y niños de más de 8 años de edad pueden consumir 100 microgramos cada día sin correr ningún peligro, pues el exceso de vitamina D ocasiona el aumento de concentraciones de calcio, lo cual podría generar daño en los riñones, pulmones, el corazón o la sangre. Esta toxicidad ocurre generalmente por el consumo elevado de complementos dietéticos más que por el consumo elevado de alimentos que contienen vitamina D.
La cantidad apta de Vitamina D en el cuerpo influirá en el estado de ánimo, este mejora y aumenta la felicidad, por lo que se puede gozar de una buena apariencia y una excelente salud emocional y física.
ALFA