El acto de revisar el teléfono móvil de nuestra pareja, su billetera, su ropa, el automóvil y todo lugar donde pudiera esconder la prueba de algún comportamiento inapropiado u oculto, e incluso una presunta infidelidad, es más común de lo que pensamos; y aunque muchas no somos capaces de confesar que lo hemos hecho, o al menos pensado en hacerlo, estudios han determinado que 1 de cada 4 mujeres ha caído en esa tentación. ¡Celos malditos Celos!
Y como la tecnología da para todo, una empresa de seguridad norteamericana ha creado un dispositivo GPS que rastrea cada movimiento que da su pareja, al menos sus pasos virtuales; es decir, los mensajes de texto, llamadas telefónicas, contactos de su móvil y Facebook. Casi todo lo que hace a través de su “smartphone” es posible detectarlo por usted. Pero tampoco piense que es así de fácil, pues requiere del consentimiento de su pareja. Ambos deben descargar la misma aplicación a su móvil personal y su nombre es, “MCouple”.
La app permite actualizar las novedades del teléfono de él, cada media hora. Mediante un alerta te envía las notificaciones de su historial de llamadas, mensajes y hasta si comentó o recibió un “like” en su cuenta Facebook. En resumen, con relación a este tema de las aplicaciones que rastrean, hay opiniones encontradas que difieren unas de otras. Conozcamos la controversia.
Para algunos, instalar una app de este tipo en nuestros teléfonos celulares, es útil para ubicar un equipo que está perdido o ha sido robado, conocer con certeza y hacerle seguimiento al lugar de ubicación de nuestros hijos, padres, ancianos y enfermos; puede considerarse del todo válido. Pero para otros, en el caso de nuestra pareja, el acto puede ser calificado como espionaje y atenta contra derechos fundamentales.
Si bien las redes sociales y la tecnología brindan beneficios a los seres humanos, tampoco es menos cierto que han abierto un abanico de posibilidades para los infieles empedernidos y también para las esposas celópatas. Personalmente considero que el tema es mucho más profundo que el uso o no de este tipo de aplicaciones. Si usted debe usarlo porque desconfía de su pareja, porque necesita tener el control de todo para sentirse tranquila, porque está segura que en algún momento encontrará esa prueba para salir de sus dudas, le garantizo que engrosará la estadística del porcentaje de divorcios en los que la palabra “Facebook” o “smartphone” ha estado presente, la que, por cierto, es altísima.
Un muy humilde consejo: Si este es su caso, le garantizo que ninguna acción tardará mucho en ser descubierta. Estas app tampoco son infalibles, pues también existen aplicaciones que esconden de los GPS la información que el usuario quiere mantener oculta. Lo mejor es que cultive y mantenga sana su relación de pareja y use las herramientas de la tecnología para ese beneficio. Si su pareja la engaña o no, le garantizo que no necesita una app para averiguarlo, en el fondo usted sabe la respuesta.
ALFA