Muchas personas confunden el ámbar con una piedra preciosa, pero la verdad es que es de origen vegetal, pues proviene de la resina fosilizada de los árboles, principalmente del pino. Se da en mayor cantidad en Europa y la hay de diversos colores: amarillentos, anaranjados, rojizos e incluso verde oscuro.

El ámbar tiene diversas propiedades sanadoras; como por ejemplo que ayuda en la recuperación de los tejidos del cuerpo y también transforma la energía negativa y potencia la positiva para una mejor recuperación de las enfermedades. Tanto es así, que en la antigüedad muchos llevaban colgada esta piedra para prevenir enfermedades reumáticas.

Su color amarillo o dorado, que se relaciona con la energía del sol, ayuda a impregnar el cuerpo de energía y vitalidad, aliviando dolores y enfermedades; potencia la salud y elimina el estrés, a la vez que entrega fuerza y estabilidad al cuerpo y la mente. Su poder energético es tan alto que puede limpiar y sanar los chacras.

El ámbar tiene efectos benéficos sobre los órganos internos, favorece el equilibrio y agudiza los sentidos, por lo que está indicado para individuos propensos a sufrir lesiones traumáticas, o manifestaciones de desequilibrio emocional, como depresión crónica y tendencias suicidas.

Ojo, este es una piedra muy delicada energéticamente, por lo que se torna opaco y deslucido luego de ser utilizado en una sesión de terapia. Por lo tanto, al término de cada sesión, será preciso limpiarlo y dejarlo descansar varias horas.

Expertos explican que los collares de esta resina también ayudan a los niños, especialmente a los de entre 5 meses y 2 años, a calmar el dolor que produce la inflamación de las encías cuando aparecen los dientes. Porque al usar el collar los poderes calmantes del ámbar son absorbidos por la piel, logrando un efecto analgésico.

Además, todas las propiedades curativas, energizantes y estimulantes también se aprecian al usar productos cosméticos que contengan ámbar, pues actúa como un antioxidante que oxigena y descongestiona la piel, al mismo tiempo que la ilumina.

En resumen el ámbar le ayudará a:

  • Revitaliza los tejidos si se usa a la altura de ciertos órganos internos.
  • Sirve a personas con tendencia al suicidio, deseo de huir del cuerpo, o depresión crónica.
  • Contra la angustia.
  • Contra el complejo de inferioridad.
  • Para la euforia.
  • Para resolver contradicciones.
  • Dolor de muelas.
  • Contra el miedo por causas indefinidas.
  • Contra la pérdida de memoria.
  • Para suavizar el dolor de rupturas.
  • Atrae buena suerte y energías positivas.
  • Protege contra envidias y contra el mal de ojo y los hechizos.

Ya que conoce sus beneficios, no dude en usar esta piedra que, además de efectiva, luce perfecta como accesorio diario, eso sí, nunca olvide limpiarlo, para que no se le queden las malas energías.

ALFA