Un hígado sano permite depurar el cuerpo de toxinas, así como mantener una síntesis adecuada de nutrientes, y ser almacén de vitaminas liposolubles como la vitamina A, D, K y E. Existen ciertos alimentos que además de ayudar a la actividad desintoxicante del hígado, protegen al mismo órgano de su función principal. A continuación conocerá un listado indispensable de alimentos que deben ser básicos en su dieta diaria.
Ajo y cebolla para la desintoxicación efectiva. Aliado de cualquier preparación culinaria, el ajo es una fuente indispensable de alicina, compuesto que propicia la eliminación de toxinas que se hallan en los aditivos alimentarios, así como en presencia excesiva de la hormona estrógeno. Por su parte, la cebolla constituye, además de un excelente depurador, un aliado para desinflamar y liberar el exceso de líquido que retiene el organismo, resultando un estimulador danto del hígado como de la vesícula.
Brócoli, coliflor y repollo, todas las verduras crucíferas son sus mejores aliados. Estos alimentos en particular tienen un poder desintoxicante hacia el mismo hígado. El contener glucosinolatos permite que el hígado propicie su limpieza, mientras va disminuyendo el resto de las toxinas que se hallan en el torrente sanguíneo.
Los tomates son una fruta que propicia la desintoxicación hepática, al contener glutatión. Otras de las increíbles propiedades que encontrará en el consumo de tomate es para contrarrestar la anemia en las personas, al ser fuente de variadas vitaminas. Además, en ellos se hallan grandes contenidos de licopeno, los cuales son señalados por ayudar a prevenir diferentes tipos de cáncer como son el de pulmón, mama y piel.
Los aguacates son el superalimento que su hígado necesita. Denso en nutrientes, este vegetal además de contener el mismo glutatión que se halla en los tomates, contiene grasas buenas para el organismo, como lo es el omega-3. El aguacate limpia el hígado, y a la vez controla el azúcar en sangre, previniendo de enfermedades cardiovasculares, o mismas afecciones de tipo estético, al propiciar la regeneración de las células.
La remolacha es otro depurador natural que tiene la capacidad de limpiar y absorber metales pesados, cuyos compuestos se toman de los mismos aditivos, añadidos a alimentos procesados. Junto a ella, yace la espinaca que también contiene glutatión, provocando la activación de las enzimas que se encargan de limpiar el mismo hígado. Este último vegetal es fácil de adecuar a casi cualquier platillo y puede ser consumido en cualquier momento del día.
Al igual, la espinaca permite la misma desintoxicación del hígado, protege al estómago de úlceras gástricas, y es recurrente por el beneficio neurológico que aportan sus poderosos antioxidantes, y por su bajo contenido en sodio, colabora a regular la presión arterial.
Somos lo que comemos es una ley de vida, y no una frase cliché. En definitiva, si mantiene un consumo diario de los mejores alimentos, podrá prevenir de cualquier consecuencia contraproducente contra su propia salud. Más que un hígado, siempre es importante tener un organismo sano, realizando las mejores elecciones en su nutrición.
ALFA