Alimentación para ser longevos: Descubre los mejores alimentos para que disfrutes de una larga vida. Siguenos leyendo.
Comidas
Se debe comer en un intervalo de doce horas diarias (empezar después de las 08:00 y acabar antes de las 20:00 o después de las 09:00 y antes de las 21:00).
Para personas con sobrepeso o que tiendan a ganar kilos es aconsejable hacer dos comidas diarias: desayuno y comida o cena, y dos meriendas de 100 calorías con bajo contenido de azúcares (menos de 3-5 gramos), una de las cuales sustituye a una comida. Consulte a un nutricionista para prevenir la malnutrición.
Bebidas azucaradas
Todos lo sabemos: los refrescos azucarados resultan nefastos para la salud. Si los consumes en exceso, estarás tentando a la báscula e invocando el serio riesgo de sufrir sobrepeso y obesidad; dos condiciones asociadas con la hipertensión y que afectan de forma negativa a la esperanza de vida.
«Si te tomas un refresco el viernes en el cine con unas palomitas, no pasa nada; el problema empieza cuando esto se convierte en un hábito cotidiano». Si quieres una alternativa saludable, recurre al agua y añádele unas rodajas de limón para aportar sabor.
Alimentos que aumentan la inmunidad
La idea de que se puede fortalecer el sistema inmunológico consumiendo ciertos alimentos es todavía controvertida. Sin embargo algunos estudios sugieren que esta conexión puede ser real. De todos los nutrientes relacionados con el buen funcionamiento del sistema inmunológico, la vitamina E es la más prometedora.
Los investigadores sostienen que aumenta la función de las celulas T, las cuales ayudan a combatir las infecciones virales y bacteriales.
Los principales alimentos fuentes de vitamina E son los cereaIes, granos, semillas, nueces, gérmen de trigo y vegetales de hoja verde como espinacas y coles.
El ajo
Quizás no seas muy fiel seguidor del ajo. Si es así, seguro te resulte difícil agregarlo en la mayoría de los platos que usualmente preparas. ¿Pero sabias que el ajo ayuda a prevenir el cáncer? Además, desintoxica tu cuerpo, sirve para tratar dolencias como el dolor de muelas y hasta para la tos. Por lo tanto, no excluyas el ajo de tu dieta. Úsalo para prolongar tus años de vida.
Controla el peso corporal y el perímetro abdominal
En un estudio de diez años con más de 300 mil europeos adultos, la cintura ancha y la grasa abdominal se asocia a una incidencia mayor de diabetes, tensión alta, colesterol alto y enfermedades cardiacas. Una cintura por encima de los 102 centímetros en los hombres y de 98 centímetros en las mejores duplica el riesgo de muerte prematura si se compara con una cintura inferior a 86 centímetros en hombres y a 71 centímetros en mujeres.
Té verde
Sustituir el café por la bebida más popular de Asia puede ser un buen punto de partida. Es el más antioxidante de todos los tés del mercado y eso lo convierte en una ayuda para retrasar el envejecimiento, prevenir la aparición de tumores, reforzar el sistema inmune, reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y reducir los niveles de glucosa e insulina en la sangre.
Esparrago
Este vegetal tan poco valorado en nuestra cultura gastronómica, es un alimento rico en nutrientes que favorece la longevidad. Tanto es así, que sus tallos contienen vitamina K, importante para los huesos y la coagulación de la sangre. Ácido fólico, esencial para la reparación del ADN, ayudando prevenir el cáncer y retrasar el envejecimiento.
Remolacha
Contiene betaína y antocianinas, que se ha demostrado que reduce significativamente la inflamación y protege las células del envejecimiento.
Caldos, zumos, infusiones
Son una buena manera de conseguir el agua que tu piel necesita. Eso sí, si tomas caldos recuerda desgrasarlos antes. Las infusiones de té verde, cola de caballo o zarzaparrilla, además de hidratarte, te ayudan a depurar toxinas, cuya acumulación se traduce en un rostro más apagado y con granitos e imperfecciones.
Champiñones
El consumo regular de hongos se asocia con un menor riesgo de cáncer de mama. Debido a que contienen inhibidores de la aromatasa, compuestos que inhiben la producción de estrógeno, los champiñones blancos y portobello son especialmente protectores contra el cáncer de mama.
Los hongos tienen una gran variedad de propiedades beneficiosas. Los estudios sobre diferentes tipos de hongos han encontrado efectos antiinflamatorios, mayor actividad de las células inmunitarias, prevención del daño del ADN, crecimiento lento de las células cancerosas e inhibición de la angiogénesis. Los champiñones siempre deben cocinarse, ya que crudos contienen una sustancia potencialmente cancerígena llamada agaritina que se reduce significativamente al cocinarlos.
Chocolate negro
Sus polifenoles lo convierten en un buen escudo contra los radicales libres. Además es cardiosaludable, favorece la circulación sanguínea y contribuye a prevenir el envejecimiento prematuro, especialmente el del cerebro. Toma solo una onza de chocolate negro al día.
Vitamina C
Es indispensable para la producción de colágeno, que mantiene la piel tersa y elástica. Conseguirás alcanzar los 90 mg diarios que necesitas si tomas 3 piezas de fruta y una ensalada.
Habas
Las habas perteneces a la familia de las legumbres y son populares por su alto contenido en vitaminas y minerales. Destacan por su contenido en ácido fólico, el folato es una sustancia clave que interviene en el crecimiento de nuevas células, previene la anemia y produce glóbulos rojos.
Una de sus más grandes bondades se encuentra en su alto contenido en potasio y magnesio, por ello son un extraordinario aliado para regular la presión arterial. Son portadoras de grandes cualidades antioxidantes que contribuyen en la longevidad y fortalecen el sistema inmunológico. También son populares por sus beneficios para perder peso, fortalecer los huesos y favorecen la salud mental.
Proteínas
Si tienes menos de 65 años, mantén baja la ingesta de proteínas: toma aproximadamente de 40 a 47 gramos de proteínas por día si pesas unos 58-60 kilos, y aumenta a los 60-70 gramos si tu peso ronda los 90 kilos. Cumplidos los 65 debes incrementar ligeramente la ingesta de proteínas; toma algo más de pescado, huevos, carnes blancas y lácteos (mejor de cabra y oveja) para preservar la masa muscular.
Pescado dos veces a la semana. Consume pescado, a poder ser fresco, dos veces por semana. El atún y el pez espada acumulan mercurio, limita su consumo a una o dos veces al mes.
ALFA