El jade es una joya milenaria, con una importancia ancestral que aún pasa de generación a generación. La piedra es vestigio del pasado arqueológico de diferentes culturas como la maya y china, complementadas con un conjunto de creencias y tradiciones, que tienen como protagonista a esta hermosa gema, símbolo del amor, la buena suerte, la inmortalidad, la eternidad, la belleza, la virtud y la prosperidad.

Al igual que otras maravillas, sobre el jade se ciernen un sinnúmero de curiosidades que la vuelven aún más interesante. Y que sin lugar a dudas son trascendentales en la historia de esta piedra.

Ahora bien, veamos algunas de estas curiosidades del jade, que probablemente usted y muchos de nosotros no conocíamos:

Cuando los conquistadores españoles llegaron a tierras mayas, éstos le entregaron como ofrenda lo que ellos consideraban una joya invaluable, unas piedras de jade. El conquistador Hernán Cortés, al no conocer la importancia y el valor del jade, despreció la ofrenda y las desechó, debido a que él esperaba que le entregaran oro.

El nombre del jade en latín es “lapis nephriticus” que significa piedra del riñón, debido a que era considerada efectiva para el alivio de las dolencias renales, de ahí que los mayas le concedieran propiedades curativas.

En Birmania existe uno de los grandes yacimientos de jade vede imperial, pero debido a la explotación desmedida y al contrabando, las reservas están por agotarse; y la devastación de las zonas aledañas a las minas de jade son lamentables.

Los yacimientos de jade más importantes se encuentran en Guatemala y Birmania, pero también existen otras reservas naturales de este mineral en Suiza, Rusia y Estados Unidos. Aun así, para estos últimos países no es rentable su extracción por encontrarse en lugares tan remotos. Japón también cuenta con reservas, pero es considerada una piedra sagrada por lo que no la explotan.

Los principales comerciantes del jade imperial son los chinos, quienes se dirigen hasta Mandalay, al norte de Birmania, en el mercado de jade más grande del mundo, para comprar y vender piedras de jade.

En 2014, se subastó el collar de jade más caro del mundo por un precio de 27,44 millones de dólares; este contaba con piedras de jades de la dinastía china Qing. En 1933, la joyería Cartier le había engarzado un hermoso colgante con terminaciones en rubíes y diamantes, lo más curioso es que este collar fue comprado originalmente por un magnate millonario como regalo de boda para su hija, y le costó 55 mil dolores. Muy buen ahorro, ¿no lo cree?

ALFA