La aguamarina es la piedra preciosa de marzo, una gema de color verde azulada, cuyo nombre proviene del término latín “aqua marinus”, que significa «agua de mar». Esta piedra se asocia con el coraje y la valentía, debido a que en la época antigua se usaba contra las fuerzas de la oscuridad, ante las situaciones de peligro, atrayendo a los espíritus de la luz ante la adversidad, y por eso los marineros para protegerse y no sucumbir en sus travesías, la llevaban como un talismán.
La leyenda de esta piedra preciosa de marzo, comienza cuando fue encontrada en el cofre del tesoro de hermosas sirenas, por lo que los marinos de la antigüedad la hicieron su talismán emblemático, y ya en la Edad Media se asoció con el planeta Neptuno, cuando se afianzó la creencia de que las piedras preciosas eran el reflejo del cosmos y del universo.
Posteriormente, el esoterismo fue retomando esta creencia, que fue muy bien aprovechada por el mundo de la joyería, usándola como recurso de mercadotecnia para la promoción de una serie de piedras preciosas, en donde se destacan las propiedades curativas de éstas, que desde siempre han sido discutidas por los chamanes, curanderos, astrólogos y hombres de ciencia.
En el caso de la aguamarina, piedra preciosa de marzo, se cree que sirve para palear ciertas afecciones, tales como: la inflación de los ojos, la artritis, dolores de garganta y para minimizar el efecto de las varices.
La aguamarina nos lleva a imaginarnos los paisajes marinos, con el mar sereno y tranquilo. Por este motivo, la piedra preciosa de marzo, vincula a su portador con la paz, con el desarrollo de la intuición y la reflexión; siendo un buen recurso para aliviar el estrés.
Debido a que su color azul; se relaciona con la combinación del mar y el cielo, por lo general se le asocia con la vida eterna, incluso en algunas culturas como la egipcia se creía que esta gema poseía la facultad de tranquilizar las relaciones, especialmente los matrimonios, y por este motivo pasó a ser un oportuno regalo de aniversario de bodas, desde tiempos antiguos.
Frecuentemente la piedra preciosa de marzo, es asociada con la amistad, la esperanza y la fidelidad, debido a que tiene la propiedad de reforzar la interacción, la comunicación y toma de conciencia; y su color azul intenso transmite esa paz y serenidad que toda relación requiere para lograr un buen entendimiento.
Precisamente, las aguamarinas naturales son de color azul intenso; y son las más costosas y raras, siendo muy usadas en el mundo de la joyería, llegando a convertirse en una de las piedras preciosas preferidas de famosos, celebridades, de la realeza y de millones de personas alrededor del mundo.
Ese hermoso color, se debe a que esta piedra preciosa es un berilo, del mismo grupo mineral de la esmeralda, el cual se caracteriza por poseer cristales de seis caras que son expansivos, y pueden ser tan grandes como un pie; lo que la hace idónea, para la producción de piezas con muchos quilates que, pueden dividirse y pulirse de manera eficaz.
Una de las propiedades ventajosas de esta piedra preciosa de marzo, es que a simple vista es perfecta, y raramente se haya inclusiones visibles de este modo, además de que presenta menos fracturas que la esmeralda; su durabilidad es alta, y se dice que algunas de ellas imitan al diamante perfectamente.
Aunque la mayoría de aguamarinas, no son sometidas a tratamientos; en algunos casos se les aplica un tratamiento de calor, para que desaparezcan los tonos verdes que la piedra preciosa pudiese presentar, y que muchas de las gemas del mercado de la actualidad han tenido, un tono verde azulado. Esto se hace porque es muy complicado encontrar aguamarinas naturales de color azul intenso, lo que aumenta la demanda y su costo.
Por estas razones, los gemólogos han recurrido a veces, a aplicar el tratamiento basado en el calor, para transformar los tonos más oscuros en tonos azulados que parezcan originales, como las aguamarinas del collar y pendientes que le obsequió el Presidente de Brasil a la Reina Elizabeth de Inglaterra, cuando fue coronada como reina en el año 1953.
Pero la aguamarina más grande del mundo es la llamada “Dom Pedro”, en honor a Pedro I y Pedro II, los dos primeros reyes de Brasil, que tiene una altura de 36 centímetros y pesa dos kilogramos; y forma parte de un conjunto de cristales que se encuentran en depósitos geológicos de roca pegmatita, cuyos yacimientos están mayormente en Brasil, de allí que este país es la principal fuente de esta piedra preciosa de marzo, seguido por Pakistán, India y Madagascar.
Actualmente, esta gema es muy usada para fabricar los anillos de compromiso, y los “millennials”; es decir, personas nacidas entre el año 1981 a 1996, la han hecho estar de moda en los últimos años, combinándolas con frecuencia con oro rosa; siguiendo la tradición antigua de que la piedra preciosa de marzo, fortalece las relaciones y los matrimonios.
ALFA