Desde tiempos remotos, la joyería de África ha destacado con su imponente hermosura. La modernidad que la caracteriza en la actualidad, representa a menudo lo tradicional, entremezclado con materiales innovadores.
En el pasado los pueblos egipcios al Sur del Desierto del Sahara, fabricaban anillos, pulseras, collares y muchos adornos de oro, plata, latón, bronce, madera de ébano, con incrustaciones en Ámbar y Marfil. Adornos de cobre fueron empleados en África Occidental hace miles de años a.C, entre el pueblo de Malí y Costa de Marfil; las mujeres adornaban su belleza con joyas en anillos de cobre, collares camaleón en el que colgaban diferentes amuletos y talismanes que usaban como protección, simbolizando las culturas esotéricas y misteriosas de aquellas épocas.
Disponían atavíos de cobre con aleaciones de hierro, pensando que poseían poderes espirituales. Nombraban al cobre como el oro rojo, tallaban piedras de granito incorporándoles grandes perlas de cristal. Los navegantes provenientes de Portugal, cuando llegaron a las tierras africanas, intercambiaban el oro por pieles de leopardo, perlas de vidrio y cuentas de coral; estas últimas eran un erario reservado a los ricos, para mostrar el alto rango que los diferenciaban.
En el canal de YouTube Amparo Vera Grijalba, podrá deslumbrarse con una exhibición de joyería étnica africana.
Los orfebres en ese tiempo fundaron su cultura en joyas de oro y objetos de arte fabricados en ese valioso metal; de igual manera, las prendas frecuentemente estaban representadas por una conexión real o simbólica de un familiar o ser querido.
Las figuras elaboradas con oro, latón y algunas piedras preciosas; eran imágenes protectoras que personificaban a los familiares muertos y adquirían una inclinación impresionante de curación, resguardo y seguridad; utilizadas durante las muchas enfermedades.
El polvo de vidrio alcanzó una importancia transcendental, la pasta de ese material la aplicaban a las superficies para crear diseños sumamente hermosos y extravagantes. Algunos pueblos del desierto elaboraron joyas espectaculares, inspirados en sus creencias errantes, identificadas en cuentas o bolitas de vidrio; especialmente perforadas para hacer los adornos y collares.
La joyería africana ha dejado su enorme influencia en los tiempos modernos, sus espléndidos diseños con diversas formas y tendencias creadoras representan en todos sus territorios el poder del simbolismo.
Además, la minería del diamante ha llevado al Continente Africano a posesionarse en el mercado de este importante producto. Piedras maravillosas de múltiples tamaños y de valores incalculables, son adquiridas por muchos países y reinos. Estas espectaculares piedras, marcan un género único en la industria de la joyería; no solo de esas tierras sino del mundo entero. Las piezas con ese distintivo sellan el predominio de un antes y un después en esa cultura; agregándole más distinción a la orfebrería contemporánea que la distingue actualmente.
Las joyas modernas de África mantienen la esencia de lo tribal, pero adaptadas al estilo de nuestros tiempos, apropiadas a cada mujer. Alhajas en las que se mezclan el Jade, Ámbar, Turquesa, Esmeraldas; y sobre todo la reina de las piedras preciosas en el enigmático continente, el impresionante Diamante; la joya más emblemática de esas regiones, un tesoro inigualable digno de poseer.
ALFA