Muchos tenemos malos hábitos en nuestra rutina de cuidado de la piel. Desde cosas no lavarnos la cara por las noches, hasta pellizcarnos los granos y espinillas. Esto que para alguno puede llegar a parecer inofensivo, pueden estar saboteando su piel y hacer que todo el esfuerzo por tener una piel hermosa sea en vano.

Pero al igual que cualquier otro problema en la vida, el primer paso para solucionarlo es admitir que existe. Por ello le diremos cuáles son es malos hábitos que está realizando en su rutina de cuidado de la piel, para que deje de hacerlo y las reemplace con técnicas que le harán brillar y sentirse más segura. ¡Lea hasta el final!

¿Qué está haciendo mal en su rutina de cuidado de la piel?

1. No lavarse la cara por la noche

La limpieza de la piel por la noche elimina no solo la grasa acumulada, sino también otra suciedad que puede dañar las células de la piel y provocar irritaciones y envejecimiento prematuro.

Elimine esas cosas desagradables y reemplácelas con productos que nutran y cuiden la piel. No tienes que hacer una rutina de limpieza doble completa cada noche, pero es muy importante ir a la cama con la cara limpia.

Para quienes usan maquillaje, es aún más importante. El maquillaje puede asentarse y obstruir los poros, provocando acné y otras irritaciones de la piel.

Consejo: para esas noches en las que «simplemente no puede», el agua limpiadora micelar es su mejor amiga. Elimina los restos de la superficie, el exceso de grasa y la mugre del día sin necesidad de enjuagar el rostro con agua. Mantenga una botella y algunas rondas de algodón (o un paño reutilizable) al lado de la cama para una limpieza facial a prueba de perezosos.

2. Usar jabón en barra común en la cara

Este es uno de los grandes errores en cualquier rutina de cuidado de la piel. ¡Deje de usar esos jabones en barra genéricos, formulados para el cuerpo en su cara!

Los jabones desodorantes genéricos son demasiado duros para la delicada piel del rostro. A menudo alterarán el equilibrio del pH de la piel del rostro y darán lugar a una piel seca, escamosa y de sensación áspera. Creo que todos estamos de acuerdo en que vale la pena dejarlo pasar.

La piel de nuestro rostro tiende a ser más fina y mucho más sensible que la piel de otras partes del cuerpo. Además, es el más visible, por lo que debe tratarse con un toque más suave.

3. Tocar y pellizcar su piel

Es imposible que no se toque la piel, pero esto es para aquellos que descansan las manos en la cara durante el día o no pueden mantener los dedos alejados de las imperfecciones.

A lo largo del día, nuestras manos entran en contacto con millones de gérmenes que pueden incluir bacterias, virus, alérgenos y una serie de otras posibilidades desagradables. Las perillas de las puertas, los teclados, los teléfonos celulares, las computadoras de escritorio, etc., contribuyen a esta acumulación. Ahora considere transferir todo eso a su rostro cada vez que lo toque a lo largo del día. Lo

Una forma de tratar de mantener a raya las imperfecciones y los puntos negros es encontrar otros lugares para descansar las manos. O intente usar un pañuelo de papel o un paño limpio como barrera para mantener el aceite, la suciedad y la mugre de sus manos lejos de la cara.

El otro problema es tocar las imperfecciones. Ya sea que se trate de un grano que aparece a la mitad del día, picazón, piel escamosa o un cabello coloreado, mantener los dedos alejados puede parecer casi imposible. A menudo, pincharlo puede provocar más daño que simplemente ignorarlo. El enrojecimiento, la infección y la posibilidad de cicatrices son preocupaciones a considerar.

Si necesita corregir una imperfección durante el día, aquí hay algunas pautas a seguir.

  • Lávese las manos antes de tocar la piel.
  • Use un hisopo de algodón o un pañuelo facial en lugar de sus manos desnudas.
  • Trate la mancha con un tratamiento tópico.

4. No hidratar adecuadamente

Aparte de lavarse la cara, la siguiente cosa más importante que puede hacer por su piel es hidratarla.

La piel hidratada se ve mejor. Más joven, brillante, firme, de tono uniforme, sí, la crema hidratante puede hacer todo eso. Aún más importante, la hidratación adecuada proporciona una barrera que protege la piel de la pérdida de humedad y evita que la contaminación y otros radicales libres dañen las células de la piel y la envejezcan prematuramente. Sin embargo, muchos de nosotros no hidratamos la piel correctamente.

Comience identificando su tipo de piel y sus necesidades. Alguien con piel habitualmente seca necesitará una estrategia diferente para mantener su piel hidratada que alguien con un tipo de piel más grasa. Del mismo modo, el clima también juega un papel importante.

No importa el tipo de piel o el entorno, la hidratación diaria es fundamental para todos. Se trata de utilizar las fórmulas y los ingredientes adecuados.

El agua tiene un gran impacto en los niveles de hidratación de la piel. Independientemente de los productos que uses en la piel, si está deshidratado, no hay mucho que puedan hacer. Tomar sus ocho vasos al día ayuda a que su cuerpo funcione mejor y mantendrá su piel con un aspecto joven por más tiempo.

5. No cuidar el área del escote

Al cuidar la piel de su rostro, no termina en la barbilla o el cuello, debe extenderse hacia el pecho o el escote, a veces denominado «rostro francés».

El rostro francés es esencialmente la piel desde la línea del cabello hasta los senos. Recuerde enfocar su ritual de cuidado de la piel en toda esta área para evitar tener una piel hermosa arriba de la mandíbula y una piel flácida y manchada debajo.

Esta es una de las mejores técnicas para envejecer con gracia, ¡así que comience temprano para obtener los mejores resultados!

6. No usar protector solar todos los días

A estas alturas todo el mundo sabe lo dañino que es el sol para la piel y el cuerpo. Desde el cáncer de piel hasta el envejecimiento prematuro, el protector solar es imprescindible. ¡Todos los días! Incluso en invierno o cuando está nublado.

Hay tantas fórmulas y texturas diferentes que hay algo que funciona para usted. Pero solo si lo usa. Haga que sea lo último que se ponga en la piel (aparte del maquillaje) antes de vestirse. El solo hecho de conducir en el automóvil, caminar hacia el buzón o sentarse junto a una ventana en el trabajo puede causar daños a lo largo de la vida.

7. No realizar exfoliación

A medida que envejecemos, la renovación celular comienza a retrasarse. El cuerpo no es tan eficiente para eliminar las células muertas de la piel, lo que puede hacer que la piel luzca opaca y sin vida.

Para una piel clara y luminosa, necesitamos exfoliarnos. Elimina la piel seca y muerta, ayuda a mantener los poros libres de suciedad, aceite y mugre que pueden provocar acné, y estimula al cuerpo para acelerar la renovación celular.

Para la mayoría de los tipos de piel, todo lo que se necesita es exfoliar una o dos veces por semana. Hacerlo demasiado también puede ser problemático.

8. No cambiar su rutina de cuidado de la piel estacionalmente

Así como cambia su guardarropa de una temporada a otra, debe hacer lo mismo con su rutina de cuidado de la piel.

Claro, es posible que tenga sus productos usar durante todo el año, pero a medida que cambia el clima, los ajustes a su rutina normal de la piel son clave para cuidar adecuadamente su piel.

Recuerde, su tipo de piel también puede comenzar a cambiar un poco, lo que significa que necesita diferentes productos para mantenerla saludable. Si no está seguro, programe visitas estacionales con profesionales de la piel, como su dermatólogo o un esteticista, para ayudarlo a crear soluciones específicas para la temporada para su piel.

ALFA