Las mujeres sentimos gran fascinación por las joyas, pareciera que nunca tenemos suficientes y siempre queremos más; además, nuestros gustos cada vez se vuelven más refinados y exigentes, y es que no nos conformamos con cualquier joya, la gran mayoría anhelamos poseer, una de las piedras más bellas y deseadas del mundo, el diamante; el objeto de deseo de muchas, pero al que pocas podemos acceder.
Como bien lo dijo Marilyn Monroe: “los diamantes son el mejor amigo de la mujer”; la fascinación por los diamantes va más allá de lo que nos imaginamos, muchas de nosotras soñamos con esa petición de matrimonio, y que nuestro galán, hincado de rodillas, saque de su bolsillo un hermoso anillo con el diamante más hermoso y brillante que alguien se haya imaginado, es decir, ¡una escena de película!, donde lo más relevante no es el compromiso, sino el anillo y su diamante.
Es que una de las razones por la cual las mujeres adoran los diamantes, tiene que ver con lo sentimental, porque considerando el alto costo de esta piedra preciosa, si nuestra pareja nos regala una joya con diamantes, lo que nos da a entender, es que él es capaz de despojarse de todo lo que posee, por dárnoslo a nosotras, lo cual es una gran demostración de amor, y que la relación merece el esfuerzo.
Además de eso, bien es sabido que los diamantes son para siempre; de acuerdo a su composición, y con el cuidado adecuado, puede mantener su brillo eternamente, lo que lo convierte en la joya más preciada, porque puede pasar de generación en generación, convirtiéndose en una reliquia familiar. Asimismo, por los costosos que llegan a ser, tener un diamante entre nuestras posesiones pasa a ser un símbolo de estatus social y de sofisticación.
Por otro lado, en nuestro interés por esta piedra preciosa, también es importante conocer cómo elegir el diamante perfecto; para esto, debemos tener en cuenta una serie de elementos:
- Peso: Mientras más grande sea un diamante, tendrá más quilates, evidentemente, va a ser más costoso.
- Pureza: Los diamantes de mayor claridad son los mejores, porque reflejan la luz y tienen menor número de imperfecciones, influyendo significativamente en su valor.
- Color: Tiene que ver con su grado de transparencia, lo que influye en su brillo, su belleza y su precio; si un diamante tiene un color como rosa o amarillo, es porque es muy raro, y por ende increíblemente caro.
- Corte: Se refiere a la geometría de la piedra; un buen corte es primordial para el brillo del diamante, además de su belleza.
Por su belleza y elegancia, los diamantes representan de alguna manera a las mujeres, debido a que al igual que ellas, tienen un maravilloso brillo que perdura con el tiempo, además de poseer muchas facetas, haciendo a cada mujer única y especial; por eso, a medida que pasen los años, los diamantes no dejarán de ser el sueño de toda fémina.
Los diamantes son espectaculares, como dice el artículo, el mejor amigo de la mujer, ojalá todos pudiéramos tener uno
Quisiera tener un diamante, le mostraré esto a mi novio para que tome nota y me regale uno
Qué buen artículo, me gustó mucho lo de los diamantes, me encantaría que me pidieran matrimonio con un gran diamante.
Las joyas en general son mi fascinación, y soy de esas que sueñan con tener un diamante, sería espectacular
Me encantaría tener un diamante, siento que es una marca de elegancia y distinción.