Una joya puede representar poder, estatus, arte, opulencia, amor, cultura y mucho más, pero irremediablemente detrás de cada una hay una historia que contar. Así se afirma que la joyería ha estado presente en todas las civilaciones del mundo, entre ellas la griega. Por lo que gracias a ciencias como la arqueología, se han descubierto lugares, objetos e incluso personas, que evidencian la existencia de estos pueblos y sus culturas; tal es el caso de la tumba de una noble griega, que fue hallada en la isla Sikinos con todas sus joyas.
La arqueología ha sido la ciencia que se ha encargado de estudiar, describir e interpretar a través de sus restos materiales, la historia, cultura, y formas de vida de las antiguas civilizaciones. Tal es el caso de la civilización más ilustrada, la griega, cuyos paisajes y monumentos son el legado de una tradición en la que se evidencia la mitología, el arte, la cultura, la arquitectura, la filosofía o la literatura.
¿Cómo se iba a imaginar el Director del Departamento de antigüedades de las Cícladas que hallaría un mausoleo y una tumba en el monumento Episkopi? Tal como lo dijo el arqueólogo tuvieron una suerte inesperada el pasado julio de 2018, ya que, dicho descubrimiento le ha dado una personalidad más real al edificio en el que fue encontrada, pues el mismo fue convertido en una iglesia y en un monasterio bizantino.
De acuerdo a las investigaciones realizadas, la tumba tiene alrededor de 1800 años de antigüedad, afortunadamente la caja fue hallada prácticamente intacta en la cripta, con una inscripción en alfabeto griego: Νεικώ (Neko). Según los restos, se trató de una mujer perteneciente a la nobleza de la época. Pues, dentro del sarcófago fueron encontradas piezas de oro, tales como anillos, pulseras, vasos de cristal, metal, fragmentos de ropa, un gran collar de oro y una hebilla con forma de mujer.
En Grecia, como en la mayoría de las civilizaciones, las joyas eran un elemento muy importante ya que indicaban la riqueza y el estatus, por lo que acostumbraban a lucir pulseras, pendientes y collares.
Asimismo, los arqueólogos sospechan que dicho mausoleo, ubicado al sureste de Atenas, en una de las pequeñas islas que forman parte del archipiélago de las Cícladas, fue construido exclusivamente para resguardar la tumba.
No obstante, este no ha sido el único hallazgo de este tipo.
En el 2015, un grupo de arqueólogos, quienes exploraban un pozo de piedra al sur de Grecia, hallaron la tumba de un antiguo guerrero. La misma data de 3500 años atrás y, en ella se encontraron 1400 objetos colocados alrededor del cuerpo que incluían anillos de oro, copas de plata, una ornamentada espada de bronce y 1000 abalorios con piedras, como la cornalina, amatista y jaspe dispuestas en collares.
Sin duda alguna la civilización griega fue la cuna de la sabiduría y el conocimiento, pero luego de estos hallazgos, no queda duda que debajo de sus piedras aún hay tesoros y joyas por descubrir.
ALFA