Conceptualmente hablando, el rechazo es la no aceptación, no admisión o resistencia de algo. Es esa acción que lo obliga a retroceder, oponiéndose a las circunstancias que se le presentan en un momento dado, y que no espera que le sucedan. En este sentido, el rechazo descontrola nuestras emociones.
Éste se manifiesta cuando en una etapa de su vida, especialmente en la niñez, usted no recibió amor, lo que representa que sufra de esta debilidad en el alma, convirtiéndose en el rechazo emocional. Las necesidades básicas de un individuo se satisfacen por medio del amor, la comunicación y la interacción con los demás.
Un rechazo de cualquier índole causa desequilibrios, que no nos permiten ser felices, quedándonos sumergidos en el desamor, la inseguridad, la no aceptación y la pérdida de identidad. ¡Es importante que usted controle sus emociones! Cuando algo no le guste, busque las palabras precisas para expresarlo; porque el rechazo puede llegar a descontrolar a una persona que solo necesita ser amada, recibir aprobación y aceptación.
Si usted recibe todo esto, se sentirá más seguro y estable en sus emociones. El amor siempre será la herramienta indispensable para que el individuo se desarrolle, tenga una vida sana y saludable; así que, ofrezca tanto amor como estrellas en el cielo.
Cuando se comienza a tener una amistad con el sexo opuesto, se inicia un periodo de atracción que puede culminar en una simple relación amistosa, o en el inicio de una relación amorosa; pero si este encuentro arranca con una condición de rechazo, se puede convertir en una aversión que puede afectar la orientación sexual.
Una persona, al sentirse constantemente rechazada por el sexo opuesto, puede llegar a tanto descontrol emocional, que termina buscando refugio, tal vez, en personas de su mismo sexo. El rechazo puede darse por diferentes factores: inseguridad; porque se es tímido; o porque se siente miedo al sentirse atraído o atraída, y se piensa inmediatamente en el rechazo.
Este rechazo no implica que sea heterosexual, bisexual u homosexual. El rechazo surge por otras cosas, bien sea por la incomprensión y el desamor que pudo haber recibido en la niñez, o por todas las clases de afectos que no le permitieron ser feliz.
A los seres humanos nos cuesta lidiar con el rechazo, y es más fácil optar por el dicho: “es mejor estar solo que mal acompañado”, pero, internamente no es así, ya que, en el fondo de nuestros corazones, deseamos que esa persona nos acepte con nuestros defectos y virtudes. No obstante, el rechazo forma parte de su amor propio; si es rechazado, ¡acéptelo!, y no insista perdiendo el respeto por sí mismo y su dignidad.
Dele paso al amor, y ponga a un lado la amargura y sus miedos, aprenda a controlar sus emociones, y no que ellas la controlen a usted. El hecho de ser rechazado por alguien, no implica que el mundo entero lo rechace. Alimente su amor propio, su ego y su personalidad. Éstas son las vías para mantener su crecimiento personal.
No creo mucho en el amor a primera vista; a veces, es un sinónimo de rechazo que te baja la autoestima. Gracias, me ayudó mucho la información.
A veces es mejor estar solo que mal acompañado, pero siempre es bueno relacionarse, todas las relaciones no son malas. Gracias por la información.
De niña fui rechazada, y eso no me permitió relacionarme, gracias a Dios lo superé. Muy bueno el artículo.
Es cierto, cuando un niño se siente rechazado en su núcleo familiar, de grande va a vivir con ese rechazo. Recomiendo leer este artículo.
Me encantó este artículo. Es cierto, no existe cosa más desagradable que ser rechazado por alguien