Desde la antigüedad el hombre buscó las formas para predecir su vida; asimismo, hubieron personajes que predijeron sobre acontecimientos importantes como el nacimiento de Jesús y el éxito de Alejandro Magno; no obstante, nosotras las personas modernas también hemos sentido esa misma inquietud y necesidad.
De este modo, surge el biorritmo, no como método de adivinación sino como técnica de planificación holística, sin separar ni aislar las partes en que está compuesto el ser humano; esto con el fin de prever situaciones o eventos importantes en la vida de las personas.
El biorritmo hace referencia a predecir diferentes aspectos relevantes del ser humano, de acuerdo a cálculos y ciclos matemáticos basados en su fecha de nacimiento; cuyos ciclos influyen de manera determinante en nuestro comportamiento de forma positiva o negativa.
Desde que nacemos el ritmo está íntimamente ligado a las funciones más básicas de la vida: la muerte, la respiración, los latidos del corazón, la función de nuestra sangre, dormir y despertarse, todo gira en forma rítmica o cíclica.
En este sentido, estos cambios periódicos en la vida del ser humano fueron objeto de investigación al final del siglo XIX, por el Dr. Hermann Swoboda, profesor de psicología en la Universidad de Viena, y pionero en esta área; quien se interesó en hacer varios estudios en los ritmos de vida en el hombre, y planteó lo siguiente: “Uno no necesita vivir mucho tiempo, antes de darse cuenta que la vida está sujeta a cambios consistentes”. Quiso decir que pasamos por períodos buenos y malos, y que las capacidades del ser humano pueden variar, desde muy altas a muy bajas.
También apuntó: “Hemos aprendido a reconocer que las acciones del hombre son influenciadas por cambios periódicos, y que la reacción del hombre a una impresión puede ser prevista, o anticipada”.
El biorritmo se calcula por medio de una gráfica con solo ingresar la fecha de nacimiento; a su vez, determina el rendimiento en tres aspectos básicos del ser humano: físico, emocional e intelectual; además contiene tres curvas: la azul indica la parte emocional, y tiene una duración de 28 días coincidiendo con el ciclo menstrual; el verde, dura 23 días y está relacionado al estado físico; el rojo, el intelecto y tiene un período de 33 días. Cada uno pasa por tres fases diferentes: alta, baja y crítica, con una duración específica.
Según lo que indica la barra del gráfico del biorritmo, los días en que un ciclo esté en la parte superior del gráfico, (parte positiva) se consideran días de alta energía o descarga en ese período; cuando se encuentra en la parte inferior (parte negativa) son días de baja energía o recarga en ese ciclo; en cambio, al cruzar el eje horizontal, concierne a días críticos y difíciles.
Los biorritmos definen los ritmos de la vida, y son una grandiosa herramienta que nos permite comprender cuando nuestra energía está activa o en fase crítica, para hacerle frente a los acontecimientos de forma más equilibrada.
ALFA